Javier Milei tomó este sábado en Buenos Aires el guante que Mauricio Macri le mandó desde Estados Unidos. El candidato de ultraderecha volvió a insistir con la posibilidad de sumarlo al gabinete si gana las presidenciales de este año. Las palabras del economista sonaron pésimo en la atmósfera de Patricia Bullrich. La competidora de Juntos por el Cambio se prepara para el segundo debate presidencial, que se realizará este domingo y en su entorno anticipan cambios. Dicen que apuntará a Milei y a Sergio Massa por igual. Aseguran en su entorno que volverá a insistir sobre un presunto pacto de ambos en su contra, pero cerrará otra semana más empeñada en contener las diferencias internas hablando de Macri, que concentrada en salir del tercer puesto que le siguen dando las encuestas.
“Vamos a ganar las elecciones, pero en caso de que eso no pase y gane él las elecciones, espero que nuestra coalición apoye cualquier reforma razonable en el Congreso para que Argentina deje atrás este sistema tramposo en el que estamos atrapados”, dijo el expresidente en una charla que ofreció en Harvard y después anticipó parte del discurso que podría utilizar si Bullrich no pasa a la segunda vuelta. “Estoy abierto a trabajar con cualquier otro líder que realmente quiera, basándose en ideas liberales, construir un futuro diferente para los argentinos”, sostuvo y después se atajó. “Realmente espero que (Milei) ayude mucho a Bullrich cuando esté a cargo de impulsar reformas severas contra esa terrible fuerza poderosa a favor del status quo”, cintureó Macri. Las frases resonaron toda la semana y, para desgracia del equipo de Bullrich, le marcó la agenda y la condicionó al punto de obligarla a hablar del tema.
La falencia de campaña que tiene la exministra de Seguridad genera entusiasmo en La Libertad Avanza, donde sienten a Macri como uno propio cada vez que alimenta la confusión que su apoyo a Milei genera en Juntos por el Cambio. «¿Lo va a convocar a un eventual gobierno?», le preguntaron este sábado al economista en una entrevista con Radio Mitre. «Absoluamente contestó. Me gustaría que fuera un hombre de consulta. Puede que no acepte algo formal, pero no descarto que el presidente Macri siga teniendo diálogo conmigo y lo profundice. El comentario de Macri en Harvard tiene dos aristas. En primer lugar, que lo posiciona. Me parece maravilloso, lo que dijo: si Milei presenta políticas promercado en la dirección correcta de lo que Argentina necesita lo vamos a apoyar. Eso contrasta con la mediocridad de Juntos por el Cambio y en especial de Bullrich. Eso demuestra la bajeza de JxC», lanzó Milei. También se refirió al buen vínculo con el diputado Florencio Randazzo, candidato a vice de Juan Schiarettti. «Yo tengo muy buena relación con Randazzo, y yo le rescato a él que es un tipo de gestión. Todos los lugares donde estuvo resolvió bien. No es corrupto y fue uno de los primeros que se le plantó de mano a Cristina», reivindicó el candidato de LLA en otro guiño al schiarettismo. (ver Pag.12)
«Me parece maravilloso lo que hizo (Macri). Habría que crearle una posición y que sea el representante de Argentina en el mundo, aporta su prestigio y dice cosas súper razonables, es la Argentina a la que tenemos que aspirar”, insistió. El economista de ultraderecha sabe que su conversación pública con el magnate debilita y le quita nitidez a la candidatura de Bullrich como producto electoral.
En esa clave, volvió a cargar sobre ella y deslizó una linea discursiva que podría utilizar en el segundo debate de este domingo. «La veo muy desdibujada a Bullrich, me desilusionó, con mucho dolor lo digo. Parece que cuando vió el poder cerca volvió a sus viejas prácticas de antaño. No me arrepiento de decir lo de las bombas. Yo aclaré la situación, ella estuvo involucrada en dos atentados terroristas, uno en el 76 y otro en el 77, en uno de esos hechos termina lastimada una criatura y por eso cometo el error de decir que era un jardín de infantes, pero eso no quita que no sea una tira bomba y de hecho cobró una indemnización como terrorista”, remarcó Milei.
La candidata lo demandó penalmente para que se rectifique, pero su competidor ratificó sus dichos en la radio y fue más duro. También le apuntó al canal de cable LN+. «El brazo mediático de JxC es La Nación Más, una suerte de pasquín panfletero de JxC. Fíjese todo lo que hicieron para justificar el mal desempeño de Bullrich en el debate», remarcó y apuntó a su campaña. «El comportamiento de la gente de Bullrich en redes es un indicador. Un ejemplo: nosotros teníamos un número de 30 de penetración, cuando el gobierno tiene 20. Mire toda la plata que puso Bullrich: tuvo 45 en las redes y después tuvo 50.000 bots actuando para la votación. Igual no les funcionó: sacamos 41 nosotros, Massa sacó 22, Schiaretti 12 y Bullrich 11, un desastre. Pusieron un montón plata y así y todo sacó números espantosos», la castigó.
Las palabras de Milei ensucian la previa de Bullrich en el debate. La exministra sabe que el debate no mueve la intención de voto, pero en la pelea para salir del tercer lugar no puede repetir el desempeño del domingo pasado. El viernes Macri remarcó su respaldo a Bullrich y la semana que viene podría sumarse a la campaña, pero el rol del expresidente se transformó en un lastre para la candidata en un momento crítico.