Manifestantes autoconvocados por redes sociales se movilizaron primero al Obelisco y luego a la Plaza de Mayo en la Capital Federal -y en menor medida en diferentes puntos del país-, en rechazo a lo que en las marchas denominaron “cuarentena boba”, “los ataques al campo por Vicentin” y “el avasallamiento a la Justicia y la Constitución”.
En el Obelisco, además, la manifestación se tornó violenta con una brutal agresión a trabajadores de prensa y equipos técnicos del canal C5N, a quienes intentaron proteger colegas de otros medios que estaban presentes en el lugar.
«¡Van a empezar a tener miedo, hijos de puta!», gritó uno de los manifestantes mientras golpeaba la puerta del móvil televisivo, quien fue captado desde dentro del camión por un teléfono celular.
Sin respetar la distancia social que dispone el aislamiento y, en algunos casos, sin usar barbijo, los manifestantes se concentraron en principio para repudiar la continuidad de la cuarentena en el marco del mayor pico de contagios diarios que se registra desde el comienzo de la pandemia del coronavirus.
Esta semana, la agrupación «Campo más Ciudad» difundió un spot por las redes en las cuales enumeraban las razones de estas marchas que intentan replicar las concentraciones que se produjeron el pasado 20 de junio, en el día de la Bandera.
Caravanas de autos caracterizaban la metodología de estas protestas que se realizaron en el centro porteño, en Rosario, Córdoba, Mendoza y otras ciudades del país. También en Buenos Aires, algunos manifestantes se congregaron en la esquina de Cabildo y Juramento y frente a la Residencia de Olivos, donde sonaron cacerolas, bocinazos y se reproducían consignas contra el aislamiento social y las políticas del oficialismo.