El presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, convocó esta tarde a una reunión de la comisión bicameral encargada de revisar el desempeño del director del Banco Central, Pedro Biscay, que tiene mandato hasta el 2019. Fueron convocados los senadores del PJ-FpV, Juan Manuel Abal Medina y Eduardo Aguilar, y los diputados macristas Luciano Laspina y Eduardo Amadeo. Son quienes presiden las comisiones de Presupuesto y Economía del Senado y Diputados.
En esa convocatoria de carácter reservado, con acceso vedado a la prensa, los legisladores recibieron copias de una carpeta elaborada por el Poder Ejecutivo con las supuestas pruebas del mal comportamiento que el Gobierno le adjudica a Biscay: recortes de artículos publicados en distintos medios donde el funcionario critica las decisiones del BCRA y advierte sobre la bicicleta financiera alentada por esas medidas.
Según trascendió, fue el propio presidente Macri quien pidió echar a al Biscay, disgustado por el contenido de esos artículos.
Cercano al ex presidente del Banco Central, Alejandro Vanoli, Biscay es el último director del kirchnerismo con funciones en el BCRA. Sus ideas progresistas desentonan con un directorio conformado por economistas militantes de Cambiemos y empleados de la banca. Por esa soledad, su incidencia es nula en las votaciones, pero al Gobierno le molesta su presencia en las reuniones de directorio. Por eso decidió avanzar en su remoción bajo una insólita acusación de mal desempeño basada en sus artículos de opinión.
La remoción de un miembro del directorio del Banco Central por expresar opiniones diferentes a la de la mayoría del Directorio del Banco Central y del gobierno nacional, resulta ilegítima, en tanto se restringe el ejercicio del derecho a la libertad de su expresión, advirtieron en un comunicado conjunto, distintas organizaciones ligadas a la defensa de derechos sociales y humanos.
Con la firma del Cels, Ceppas e Inecyp, entre otras, el comunicado
sostiene que el intento del Gobierno afecta la pluralidad de criterios que deben garantizarse y guiar el funcionamiento del Banco Central. Su Carta Orgánica -recuerdan- establece que se trata de una entidad autárquica que no está sujeta a órdenes, indicaciones o instrucciones del Poder Ejecutivo Nacional´». Los Directores son designados con acuerdo del Senado, y sólo pueden ser removidos antes del fin de su mandato por estrictas causales previstas en la ley.
El comunicado concluye que la remoción de un miembro del Directorio del Banco Central a solicitud del Poder Ejecutivo Nacional por el solo hecho de tener opiniones diferentes al oficialismo, podría reeditar doctrinas riesgosas para el país.
El gobierno avanzó hoy otro paso hacia un escándalo: la posible remoción del director del Banco Central, Pedro Biscay, por criticar las políticas oficiales.
En una línea similar se expresó Sergio Palazzo, titular del gremio bancario. Y acusó al titular del BCRA, Federico Sturzenegger de intentar desplazar a Biscay «en represalia» porque «cuestiona la política desregulatoria del sistema que ejecuta» el presidente del banco «con complicidad del resto del directorio».
Sin mayoría propia en el Senado, el gobierno depende del visto bueno del peronismo para avanzar con la remoción. Según fuentes del PJ, Abal Medina y Aguilar tendrían la instrucción del presidente del bloque, Miguel Pichetto, de concederle el deseo al presidente sólo si el Gobierno acepta reemplazar a Biscay por otro director afín al PJ.