El registro de emergencia de la vacuna de AstraZeneca por parte de la ANMAT le aseguró al gobierno argentino que podrá empezar a inmunizar con ese medicamento apenas reciba las primeras dosis desde México. El último cronograma presentado por la farmacéutica con sede en el Reino Unido indicaba que las vacunas estarían disponibles a fines de marzo o principios de abril. De esta manera, se podría continuar la campaña iniciada con Sputnik V y habría dosis suficientes para cubrir a las 24 millones de personas identificadas como prioritarias según el Plan Estratégico para la Vacunación contra el Covid-19.
La autorización condicional se otorgó por el plazo de un año. Según informó AstraZeneca en un comunicado, el método de inmunización también implica la aplicación de dos dosis con un intervalo de entre 4 y 12 semanas. Los estudios preliminares publicados a fines de noviembre le garantizaron una eficacia promedio de 70,4%, pero también mostraron que podía ascender hasta 90% si se realizaba una combinación distinta de las vacunas (primero media dosis y luego una completa). En tal sentido, AstraZeneca suscribió un acuerdo con Sputnik V para combinar sus tecnologías.
La Argentina firmó un contrato para recibir 22,4 millones de dosis de AstraZeneca. Pero, además, un laboratorio local produce desde hace tres meses la sustancia activa de la vacuna, con órdenes de producción por 150 millones de dosis. Tiempo se comunicó con los voceros de mABxience, del Grupo Insud, quienes confirmaron que en enero partirán hacia México los primeros lotes del medicamento para que allí se envasen y distribuyan en toda la región. “De nuestra parte está todo listo. En México tienen que realizar todos los protocolos de prueba, testeos y aprobaciones de organismos regulatorios para evaluar el fraccionamiento y llenado”.
La vacuna de AstraZeneca es una de las que más expectativas genera a nivel mundial, ya que la empresa, que contó con la asistencia de la Universidad de Oxford en el proceso de investigación y desarrollo, se comprometió a comercializar el producto sin obtener ganancia durante el tiempo que dure la pandemia. Eso implica un valor que ronda los 4 dólares por dosis (hasta cuatro veces más económica que las de Pfizer-BioNTech o Moderna). Además, su vacuna se puede conservar hasta seis meses a una temperatura de entre 2 y 8 grados bajo cero. Esas variables son más manejables que las de Pfizer-BioNtech (-70°C) y aun Sputnik (-18°C).