La noticia, revelada por La Nación, golpea al riñón más íntimo del presidente Mauricio Macri y uno de sus funcionarios de más confianza, el titular de la AFI, Gustavo Arribas, cuando se desempeñaba como empresario y representante de jugadores especializado en triangulaciones sospechosas.
Los datos se desprenden de la confesión de Leonardo Meirelles, operador financiero y cambiario de la multinacional brasileña Odebrecht luego de que la empresa reconociera haber pagado coimas en varios países para operar.
Según reveló el periodista Hugo Alconada Mon, Meirelles, ya condenado por su rol en la investigación Lava Jato, transfirió a una cuenta de Arribas 600 mil dólares en cinco pagos durante el 25, 26 y 27 de septiembre de 2013. Comenzaron al día siguiente de que se reactivara el contrato de Odebrecht para el soterramiento del tren Sarmiento en la Ciudad.
En una confesión a la justicia brasileña para reducir su pena, Meirelles aportó documentación sobre miles de transferencias que hizo para Odebrecht y otras empresas brasileñas.
Las transferencias fueron por un total de 594.518 dólares a una cuenta del jefe de los espías en Suiza de Arribas, quien en ese momento vivía en Brasil.
El funcionario reconoció solo una transferencia, por poco más de 70 mil dólares por la venta de un inmueble en San Pablo.
Arribas sólo admite una transferencia y la adjudica a la venta de un inmueble en Brasil.
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