Se cumplió el acto que conmemoró el 23º aniversario del sangriento atentado a la Amia, y la característica central fue la ausencia del presidente Mauricio Macri y de su vice, Gabriela Michetti, lo que provocó algúna muestra de desagrado, aunque no se manifestó en los discursos. 

En el acto del 2016, el primer magistrado había concurrido pero se había retirado antes de los discursos, lo que provocó un desagrado entre los integrantes de la mutual judía. En esta ocasión el enviado de la Casa Rosada fue el jefe de Gabinete, Marcos Peña. Fue el propio funcionario quien justificó la ausencia de Macri al asegurar que el presidente «estuvo hace pocos días con dirigentes de la comunidad».

En el mismo sentido aseguró: “Lo importante es que acompaña plenamente todo lo que tiene que ver con esta búsqueda de Justicia y el acompañamiento en el dolor”.

La ceremonia que recordó el 23º aniversario del ataque a la mutual judía, a la sede de la calle Pasteur, contó con un severo discurso de su titular, Agustín Zbar, quien aseguró que el atentado «golpeó desde el exterior a la naciente democracia y dejó una herida aún sangrante, que se llama impunidad». 

El dirigente reclamó también: «Pedimos la unidad del pueblo para terminar con la impunidad». Finalmente exigió el avance en la investigación sobre la muerte del fiscal Alberto Nisman. Al respecto dijo: «Cumplió con su deber, su muerte está indisolublemente ligada a la causa de la AMIA: ojalá pronto tengamos justicia».