En la Casa Rosada en general y en la Secretaría de Comercio en particular, miran aliviados los números del Indec. El propio secretario Roberto Feletti no oculta su satisfacción. Es que el plan para frenar los precios -que impuso hacia afuera pero que también le costó imponer hacia adentro del gobierno y el propio ministerio- hasta el momento parece haber funcionado.
De paso, sumó el acuerdo efímero por los días festivos para que lleguen cinco cortes populares de carne a precios accesibles a todo el país. Ambos programas, el festivo y el de Precios Cuidados, tiene orígenes distintos. Mientras que el acuerdo cárnico fue producto del diálogo, a Precios Cuidados hubo que imponerlo por la fuerza. “Seguían subiendo los precios mientras estábamos sentados negociando”, recuerdan sobre los primeros días en la Secretaría.
Este miércoles Cristina Fernández de Kirchner tuiteó un fragmento de una reciente conferencia de prensa de la vocera del presidente de EE.UU., Jen Psaki. En él, la funcionaria de Joe Biden hace mención a la «codicia» de algunas empresas productoras de carne como una de las razones que explican la desacostumbrada inflación en alza -casi 7% interanual para noviembre- en el país del norte.
Este martes, Guzmán les recordó a los legisladores en Diputados que uno de los puntos de negociación con el Fondo son los acuerdos de precios para frenar la inflación. Más allá de la poca disposición opositora, que ya adelantó que va a votar en contra del Presupuesto, el gobierno parece haber encontrado por lo menos una estrategia común.
Feletti, hombre que responde a la vicepresidenta, entró a la secretaría de Comercio en reemplazo de Paula Español enfrentado a su jefe institucional Matías Kulfas, quien tiene terminal en Alberto Fernández. Sin embargo, después de una reunión entre ambos de la que también participó Martín Guzmán y Julián Domínguez, ministro de Agricultura y Ganadería, las cosas se empezaron a acomodar.
Desde el día del congelamiento hasta ahora, Feletti y sus funcionarios se reunieron con empresas grandes, extranjeras y nacionales, como Unilever y Molinos, así como pymes y empresas familiares. Durante las negociaciones, las reuniones fueron segmentadas por tamaño: las más grandes, las medianas y las chicas.
Según cuentan, algunas de estas últimas muy interesadas en participar de Precios Cuidados porque les da un lugar en la góndola y hasta publicidad con sello estatal. Por su parte, las más grandes pidieron cambios sacar algunos productos para sumar otros. Se terminó así de elaborar una lista de 1332 nuevos productos que se pondrá en vigencia el 8 de enero, el día después del final del plazo del congelamiento.
Controles
Desde la Secretaría aseguran que se realizan 120 inspecciones por semana, en las que se registra un abastecimiento de los productos del listado de un 80% y un cumplimento 98%. Sin embargo, su alcance es limitado al AMBA. En el resto del país, funciona como órgano el Consejo Federal Comercio Interior, que reúne a todas las provincias. “Todas las provincias ponderan el programa, incluso las gobernadas por opositores”, aseguran fuentes de la secretaría.
A su vez, cuentan con el Sistema Electrónico de Publicidad de Precios Argentinos en el que, si bien los supermercados de todo el país mandan bajo declaración jurada los precios, se asegura que los mismos bajaron promedio 7.6% la primera semana de la resolución. La lectura oficial del gobierno es que un acuerdo con el sector privado, tal como lo pide Guzmán y el FMI, es más un avance que un retroceso, como lo plantearon sectores opositores.