El presidente Alberto Fernández encabezará por última vez una delegación argentina en el exterior antes del recambio institucional del 10 de diciembre, al asistir este jueves a la 63ª edición de la Cumbre de Jefes de Estado del Mercosur que se realizará en la ciudad brasileña de Río de Janeiro.
El encuentro se llevará a cabo sin acuerdo cerrado en torno al Tratado de Libre Comercio (TLC) con la Unión Europea (UE).
Fernández regresará una vez que culmine la cumbre, informaron fuentes de Presidencia. Toda la actividad se realizará en el Museo del Mañana, en el centro de la ciudad carioca, desde las 11 con el Encuentro de Jefes de Estado de Estados Parte.
A las 12.50 se hará la foto oficial, y diez minutos después será el almuerzo ofrecido por el presidente anfitrión, Luiz Inácio Lula da Silva, a los jefes de Estado de Estados Parte, Asociados e invitados especiales.
A las 15 tendrá lugar la Sesión plenaria de Jefes de Estado, Asociados e invitados especiales, que concluirá a las 18.
Fernández reiterará la posición que su Gobierno esgrimió contra las exigencias medioambientales europeas para el TLC entre ambos bloques, el talón de Aquiles de la hasta ahora frustrada negociación.
Si bien la Argentina fue uno de los países que más señalamientos hizo a la «side letter» ambiental que impulsó Bruselas, tanto Brasil como Paraguay apuntan a la intransigencia europea como factor fundamental del fracaso.
La secretaria de Relaciones Económicas Internacionales, Cecilia Todesca Bocco, dijo este miércoles a Télam, tras participar de la 63ª Reunión Ordinaria del Consejo del Mercado Común (CMC), que el acuerdo «no se cierra y se está negociando» y aclaró que «Argentina no estaba para firmar».
Todesca Bocco reseñó que recibieron ese documento «de la gestión anterior», en referencia al Gobierno de Mauricio Macri, y que «tiene sus problemas», y contó que la UE «lo ha negociado apuradamente con el Mercosur, pero fue la voluntad del resto de los socios» del Mercosur para su aprobación en aquel momento.
El acuerdo comercial fue firmado en junio de 2019 por los entonces presidentes de Argentina y Brasil, Mauricio Macri y Jair Bolsonaro, pero más tarde, cuando se trabajaba sobre los detalles, Europa agregó un documento con exigencias medioambientales que la gestión de Fernández visualizó como negativas para la Argentina.
En la Cumbre de Presidentes se espera además la firma de comunicados conjuntos y la Declaración Especial de Presidentes sobre Democracia e Integridad de la Información en Entornos Digitales.
Está prevista también la firma del Tratado de Libre Comercio entre el Mercosur y Singapur, el primer instrumento de esta naturaleza firmado por el bloque después de más de una década, y se anunciará la adhesión de Bolivia como miembro pleno del bloque sudamericano.
Por la mañana de este miércoles, en la 63ª Reunión Ordinaria del CMC, además de Todesca Bocco participaron por Brasil el vicepresidente y ministro de Fomento, Industria, Comercio y Servicios, Geraldo Alckmin; la ministra de Planificación y Presupuesto, Simone Tebet; y el canciller Mauro Vieira.
Por Paraguay lo hicieron el canciller Rubén Ramírez y el viceministro da Economía, Carlos Javier Charotti; por Uruguay participaron el canciller Omar Paganini y la ministra de Economía, Azucena Arbeleche; y por Bolivia estuvieron la canciller Celinda Sosa Lunda y el ministro de Economía, Marcelo Montenegro Gómez García.
En su discurso, Alckmin expresó que «la integración no se logra sólo con grandes gestos y grandes acuerdos, también se hace en el día a día, con avances específicos que desbloquean barreras y crean oportunidades», y destacó la VIII Ronda de Negociaciones sobre Compromisos Específicos en Materia de Servicios del Mercosur para comerciar entre los países, además de avanzar en el tema de la conducta empresarial responsable en el ámbito del bloque.
«Sin duda somos una potencia en el sector energético y podemos dar un salto adelante en la exploración, el transporte y el valor agregado de nuestros recursos naturales. Es esencial avanzar en la agenda de comercio sostenible», resaltó.
El vicepresidente de Brasil subrayó «los importantes avances» en las negociaciones entre el Mercosur y la UE con «los compromisos de ambas partes hacia un entendimiento equilibrado en un futuro próximo y basado en las bases sólidas» que se construyó en los últimos meses.
Por su parte, Vieira refirió que durante la presidencia pro tempore brasileña se acordó extender por un año más la duración del trabajo del Grupo Ad Hoc sobre Comercio y Desarrollo Sostenible, manteniendo su mandato original; la firma del Memorando de Entendimiento entre el bloque regional y la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa; y del memorando de entendimiento entre el Mercosur y la Organización de Estados Latinoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI), que se centra en temas de cooperación.
El Gobierno brasileño hizo pagos relacionados con sus obligaciones financieras con varios órganos del bloque, entre ellos la Secretaría del Mercosur y el Instituto de Políticas Públicas de Derechos Humanos (Ippdh), además de casi 100 millones de dólares al Fondo de Convergencia Estructural del Mercosur (Focem), que tiene una agenda «que tiene un impacto concreto en la vida de las personas», indicó el canciller, y pagos para resolver las disputas financieras de Brasil con el Instituto Social y el Tribunal Permanente de Revisión.
«Buscamos, con esto, contribuir para que estos organismos puedan renovar sus capacidades para realizar bien sus actividades y así puedan seguir apoyando a nuestros países», señaló.
Y se avanzó en las negociaciones con la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA), bloque formado por Islandia, Liechtenstein, Noruega y Suiza, que se espera concluir durante la presidencia paraguaya del Mercosur.
La jornada concluyó por la tarde con la Reunión de Ministros de Relaciones Exteriores de los Partes del Mercosur, Estados Asociados e Invitados Especiales, con la ponencias de los países asociados Mercosur, esto es Chile, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú y Surinam; y otros organismos.
Venezuela está suspendido como miembro pleno desde 2017.
A los mencionados Todesca Bocco, Ramírez, Paganini y Sosa Lunda, se sumaron los embajadores de Ecuador en Brasil, Carlos Alberto Velástegui; y de Perú, Rómulo Acurio; el encargado de Negocios de Guyana, Vernon Anthony Robinson; el jefe de la División de Integración Regional Multilateral, embajadora Constanza Mabel Figueroa Sepúlveda; y el director de Mecanismos Regionales de Concertación e Integración de Colombia, Embajador Javier Darío Higuera
Como invitados especiales los hicieron los ministros de Asuntos Exteriores de Singapur, Vivian Balakrishnan; y de Comercio e Industria de Singapur, Alvin Tan.
El Mercosur representa el equivalente a la octava economía más grande del mundo, con un PIB de 2,86 billones de dólares.
En 2022, Brasil exportó 21.700 millones de dólares al bloque e importó 18.500 millones de dólares, con un superávit de 3.200 millones de dólares.
Alrededor del 90% de nuestras exportaciones fueron productos manufacturados. Los intercambios dentro del bloque se han multiplicado más de diez veces desde su creación, pasando de 4.500 millones de dólares en 1991 a 46.000 millones de dólares en 2022.
El Mercosur es el principal receptor de inversión extranjera en América del Sur, habiendo recibido, en 2022, el 64% del total asignado a la región.