“Sergio volvé a Buenos Aires, tomemos un café y terminemos con este tema, a ver cómo podemos avanzar, porque comparto todo lo que decís, tenemos que estar juntos cada uno desde su autonomía, nadie debe someter a nadie, estamos construyendo otro tipo de fuerza y sé que tenemos más puntos en común que disidencias, así que venite y tomamos un café».
Con esa definición, el precandidato presidencial del frente PJ-kirchnerista, Alberto Fernández, puso en el terreno de Sergio Massa la decisión de definir un acuerdo de unidad con la construcción que encabeza junto a la expresidenta Cristina Kirchner. Lo hizo a tres días de que venza el plazo para la presentación de alianzas electorales y en el marco de tres nuevos triunfos electorales provinciales del peronismo.
Fernández y Massa cruzaron saludos durante una entrevista al canal C5N. El primero, en los estudios de la emisora, y el tigrense desde Chubut, hasta donde había viajado para marcar el territorio del triunfo del gobernador Mariano Arcioni para ponerlo dentro del Frente Renovador.
El diálogo, en el que Massa se mostró reticente a las definiciones justo el mismo día en el que había trascendido un posible acuerdo con el PJ y el kirchnerismo, estuvo precedido por algunas definiciones de Fernández acerca de la posibilidad de conformar un frente electoral opositor. “Lo que falta es la decisión política de Sergio. Si no lo quiere hacer es respetable, pero es él el que debe definir cuál es su objetivo, qué quiere hacer, dónde lo debe hacer”, sostuvo.
Acompañado por Arcioni, a quien le había pedido que no se expresara sobre la fórmula Fernández-Fernández, como ocurrió con la mayoría de los gobernadores del PJ, Massa ratificó su voluntad de construir una nueva mayoría. “Más allá de que obviamente con Alberto tenemos cada uno nuestro deseo de presidir la Argentina, todos tenemos la responsabilidad de construir una mayoría que represente a la enorme cantidad de argentinos que está sufriendo frente a una Argentina de timba financiera y pobreza. Es muy importante que cada uno sume desde su identidad”, dijo.
Y recordó que el documento con la propuesta de gobierno que difundió el sábado constituye la base de cualquier acuerdo electoral, pero no ofreció una respuesta concreta sobre el entendimiento final. Apenas le prometió a Fernández tomar un café a su regreso de Chubut.
Fernández evaluó los resultados electorales de la primera mitad del año, abrumadoramente favorables al peronismo. “Diría que hay un común denominador que es el rechazo a Cambiemos, lo que se verifica es que Cambiemos ha hecho elecciones espantosas en todos lados, en provincias donde fueron muy fuertes como en Córdoba, se cayeron muchísimo. Nosotros ya estamos lanzados y lo que esperamos es que de aquí al miércoles podamos incorporar a todos los que tengan la voluntad de hacer un gran frente opositor y tengan la idea de dar pelea”, sostuvo.
El candidato ironizó sobre la posibilidad de que Massa termine acercando posiciones con Alternativa Federal, el sector del PJ que rechaza una alianza que contenga a Cristina Kirchner. “Me parece que sería raro un acuerdo con Alternativa Federal, donde uno de sus candidatos dice que en segunda vuelta votaría a Macri”, sostuvo, en alusión a Miguel Pichetto.
En tres oportunidades Fernández dejó en manos de Massa la decisión sobre su futuro político: “Siempre soy optimista porque cuando hablamos en la intimidad nos damos cuenta que la unidad favorece y garantiza un triunfo sobre Macri en los términos que lo estamos viendo. Donde el peronismo y la oposición se unen el resultado es muy valorable. Ojalá lo entiendan, y si no, lo haremos nosotros que estamos convencidos de nuestro rol, sabemos qué representamos y qué debemos confrontar. No sé qué quiere hacer Segio pero no tengo más ganas de hablar por Sergio”.