El presidente Alberto Fernández convocó finalmente a la tan demandada mesa política para organizar la estrategia electoral del Frente de Todos, para el jueves de la semana próxima. Con la intención de darle institucionalidad al encuentro estableció que se realizará en la sede del PJ nacional, que él preside. Como previa, recibió el martes por la noche a intendentes cercanos.
En medio de las tensiones internas que no desaparecen a pesar de los llamados a la paz, el presidente convocó formalmente a “todos los espacios políticos” que integran el FdT a concurrir el jueves 16 a las 19 en la sede de Mateu 130. Es decir que deberán ir todas las autoridades de los partidos políticos que integran el la coalición, desde el Frente Renovador de Sergio Massa, pasando por el Partido Comunista hasta el Frente Patria Grande que lidera Juan Grabois.
Como previa, para ir juntando volumen político, este martes a la noche cenó con intendentes que no fueron a la reunión del martes pasado en Merlo. A Olivos concurrieron Alberto Descalzo de Ituzaingó, Juan José Mussi, de Berazategui, Juan Zabaleta, de Hurlingham y el diputado nacional y jefe político de Florencio Varela, Julio Pereyra. También fueron de la partida los ministros de Obras Públicas, Gabriel Katopodis; y de Hábitat, Santiago Maggiotti; al igual que el secretario general de la presidencia Julio Vitobello y la portavoz Gabriela Cerruti. La única figura que estuvo en Merlo y también concurrió a Olivos es Katopodis, uno de los pocos dirigentes que tiene diálogo con todos los espacios.
Con la cena de este martes el presidente intenta ganar volumen en un territorio en el que el kirchnerismo fue copando todos los espacios de poder del peronismo. En la reunión del martes pasado estuvieron y hablaron cuatro dirigentes de peso como el propio gobernador, Axel Kicillof, el presidente provincial del partido, Máximo Kirchner, y el ministro de Economía, Sergio Massa. También estuvieron intendentes de la primera y la tercera sección. Allí quedó conformada la mesa bonaerense que puso primera para salir a militar la reelección de Kicillof, pero también de muchos jefes comunales que quieren mantenerse en su cargo. Fue un mensaje claro para Alberto, a quien acusaban de dilatar los tiempos cuando el calendario electoral ya había empezado a correr.
En Merlo hubo algunos faltazos. Y de hecho los dirigentes bonaerenses que no fueron sí concurrirán a Olivos a cenar con el presidente.
La discusión sobre la mesa como ámbito político quedó entrampada en si se iba a activar sólo para cuestiones proselitistas, como pretende el presidente, o sí también se podía discutir cuestiones de gestión. Un debate estéril ya que el corazón de la gestión está tomado desde el ministerio de Economía y todas las áreas del Estado que orbitan a su alrededor.
Por lo pronto, la semana próxima, en la tradicional sede del PJ compartirán el encuentro el presidente y su ministro de Interior Eduardo “Wado” de Pedro, con quien no se habla. “Gobierno con los que puedo gobernar” dijo Fernández es lunes en una entrevista cuando le preguntaron por su relación con el dirigente camporista. Es que “Wado” es secretario político del PJ nacional, por lo que su presencia representa al kirchernismo camporista dentro del peronismo, ya que el propio Máximo Kirchner se autoexcluyó de esa cumbre, tal como lo anunció en varias entrevistas.
