El fundador y CEO de Facebook, Mark Zuckerberg, dijo este martes que es «responsable» de los «errores» cometidos por su empresa por el uso inadecuado de datos de usuarios al enfrentarse por primera vez al Congreso de Estados Unidos.
El magnate de la tecnología volverá el miércoles al Capitolio para testificar ante la comisión de Energía y Comercio de la Cámara baja sobre el rol de la red social en los escándalos de Cambridge Analytica (CA) y la «interferencia rusa» en las elecciones de 2016.
Zuckerberg, de 33 años, llegó al recinto de traje, dejando de lado su habitual vestimenta de jeans y remera para responder las preguntas de 44 legisladores en una audiencia conjunta realizada por las comisiones Judicial y de Comercio del Senado.
Visiblemente demacrado y serio, Zuckerberg fue rodeado por decenas de fotógrafos antes de comenzar su exposición.
«El error fue mío y lo lamento. Yo inicié Facebook, lo dirijo y soy responsable de lo que sucede aquí», fue la primera afirmación del empresario.
«No tuvimos una visión suficientemente amplia de nuestra responsabilidad y ese fue un gran error», declaró, y asumió la responsabilidad por los «errores» cometidos por la red social que fundó.
La comparecencia del ejecutivo ante el Senado se produjo a raíz de que en marzo de este año, distintos informes periodísticos revelaran que la consultora política británica Cambridge Analytica (CA) tuvo acceso en 2014 a datos recopilados por Facebook y usó esa información para desarrollar un software destinado a predecir las decisiones de los usuarios e influir en ellas.
CA habría usado los datos de hasta 87 millones de personas, principalmente en los Estados Unidos, para favorecer a Donald Trump en su carrera hacia la presidencia de Estados Unidos.
Al respecto, Zuckerberg testificó que Facebook no notificó a la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos sobre la filtración de datos de Cambridge Analytica porque el gigante de las redes sociales «consideró que era un caso cerrado».
Otro de los ejes de los cuestionamientos de los legisladores estuvieron relacionados a la supuesta injerencia rusa en las elecciones que llevaron a Trump a la Casa Blanca.
En septiembre del año pasado, Facebook informó que 470 cuentas falsas «probablemente» operadas desde Rusia, gastaron alrededor de 100.000 dólares en contratar anuncios políticos en esta red social en los últimos dos años.
Sobre este tema, el directivo informó al Senado que personal de su empresa «trabaja con el equipo» del fiscal especial de la trama rusa, Robert Mueller, que investiga de forma independiente la posible intromisión rusa en las elecciones presidenciales estadounidenses, así como si hubo o no coordinación entre Moscú y la campaña de Trump para perjudicar a la candidata demócrata, Hillary Clinton.
«Uno de mis mayores remordimientos es que fuimos lentos en la identificación de las operaciones rusas en 2016», admitió Zuckerberg.
«Está claro ahora que no hicimos lo suficiente para evitar que estas herramientas se usen también para daños. Eso aplica a noticias falsas, interferencia extranjera en elecciones y discursos de odio, así como a desarrolladores y privacidad de datos», añadió.
El CEO también señaló durante la audiencia que «siempre habrá una versión de Facebook gratuita», aclarando comentarios recientes de la directora de operaciones de la compañía, Sheryl Sandberg, que esta semana habló de la posibilidad de una versión paga de la plataforma.
Zuckerberg tuvo uno de los intercambios para intensos con el senador Lindsey Graham que le preguntó, en reiteradas oportunidades, si pensaba que Facebook era un monopolio: «Ciertamente no me parece así», respondió el ejecutivo, en medio de risas del auditorio.
El creador de la red social consideró además que «no toda la regulación es mala» en Internet y que debe haber «una conversación» sobre cuál es la «regulación correcta».
Crédito Télam