El Ejército de EEUU considerará a los migrantes que les arrojan piedras como si estuvieran usando un arma de fuego y como consecuencia podrían dispararles, dijo este jueves el presidente Donald Trump.
Cuando se le preguntó si los militares estadounidenses desplegados en la frontera dispararían contra los migrantes, Trump dijo que esperaba que no llegaran a eso, pero agregó: «Nadie arrojó piedras, como lo hicieron con México y el Ejército mexicano, la policía mexicana, lastimaron gravemente a la policía y a los soldados de México, consideraremos que eso es un arma de fuego», dijo Trump a los periodistas.
En este momento son tres las caravanas de migrantes que viajan hacia EEUU, la primera salió el 13 de octubre de Honduras, la segunda el domingo desde El Salvador y la tercera este miércoles también desde este último país.
César, un migrante de El Savaldor que salió en la caravana del miércoles, dijo el martes a Sputnik que «si ese presidente (Donald Trump, EEUU) quiere atentar contra nuestras vidas sería ya demasiado como para que todo el mundo no haga algo y lo quiten de la presidencia».
Trump dijo el miércoles que desplegará hasta 15.000 efectivos militares en la frontera sur con México para frenar la caravana de migrantes, que considera una «invasión».
Desde la tarde del martes había un poco más de 1.000 soldados en el sur de Texas (sureste) y ese número irá creciendo a medida que las fuerzas se mueven al lugar, dijo Terrence O’Shaughnessy, jefe del Comando Norte de EEUU, según un comunicado del Departamento de Defensa.