Rusia aseguró este viernes haber tomado el control de diez localidades en los últimos cinco días de ofensiva en el este de Ucrania y acusó a la Unión Europea (UE) y la OTAN de «articular una coalición moderna para librar una guerra» contra el país. Las fuerzas ucranianas anunciaron que se retirarán de Severodonetsk tras semanas de una tenaz ofensiva de las tropas rusas que dejó la ciudad reducida a escombros, informó hoy una autoridad local ucraniana.
La toma de Severodonetsk, en la región oriental del Donbass, se convirtió en un objetivo clave de los rusos, después de que sus tropas fueron repelidas de Kiev tras el inicio de la invasión lanzada en febrero. Esta estratégica localidad fue escenario de duros combates callejeros durante semanas en las que los ucranianos intentaron superar la desventaja bélica con una férrea resistencia.
Sin embargo, Serguei Gaidai, gobernador de la provincia de Lugansk, donde se encuentra esta ciudad industrial, indicó que las tropas se retirarán. «Las fuerzas armadas ucranianas tendrán que retirarse de Severodonetsk. Han recibido una orden para hacerlo», dijo en Telegram. «Permanecer en posiciones que fueron bombardeadas incesantemente durante meses no tiene sentido», añadió citado por la agencia de noticias AFP. La ciudad quedó «casi convertida en escombros» por los continuos bombardeos, dijo el gobernador.
La toma de Severodonetsk permitiría a los rusos avanzar sobre la localidad vecina de Lisichansk, consolidando su control de la provincia de Lugansk y permitiendo progresar en su ofensiva por la cuenca minera del Donbass, que desde 2014 ya está parcialmente bajo control de separatistas prorrusos.
El Ministerio de Defensa ruso aseguró este viernes que en los últimos cinco días tomó el control de diez localidades en Lugansk, donde está cerca de conquistar toda la provincia. Gaidai informó que ahora los rusos avanzan hacia Lisichansk que también está bajo un rudo asedio de las tropas de Moscú, que bombardean sin cesar esta localidad.
En el sur de Ucrania, en la ciudad de Jerson, que está bajo control de los rusos, un alto mando nombrado por Moscú murió en un ataque con explosivos colocados en su coche. Ucrania multiplica los llamados para acelerar las entregas de armamento y ayer Estados Unidos anunció el envío de una nueva partida de ayuda militar por 450 millones de dólares.
Kiev recibió este jueves también un importante apoyo de la Unión Europea (UE), que le concedió, junto a Moldavia, el estatus de candidatos a la adhesión al bloque, una decisión adoptada en tiempo récord por la invasión rusa iniciada el pasado 24 de febrero. Ante esto, el canciller ruso, Serguei Lavrov, acusó hoy a la UE y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) de estar articulando «una coalición moderna para librar una guerra» contra Rusia, y comparó la situación actual con la fase inicial de la Segunda Guerra Mundial.
Así lo señaló el jefe de la diplomacia rusa durante una conferencia de prensa celebrada en la capital de Azerbaiyán, al término de un encuentro con su homólogo, Ceyhun Bayramov, con quien lamentó que ese sea «el camino que eligieron los europeos». «Conste que Hitler reunió bajo sus estandartes a una parte considerable, cuando no a la mayoría de las naciones europeas, para una guerra contra la Unión Soviética. También la UE y la OTAN están articulando una coalición moderna para luchar contra Rusia y, de hecho, para librar una guerra contra ella», dijo.
Por su parte, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, dijo que la decisión de la UE constituye un asunto «interno de Europa», aunque subrayó que es «importante» para Moscú que «todos estos procesos no traigan más problemas a Rusia y en las relaciones de esos países con Rusia». Consultado por las relaciones entre Moscú con la UE, dijo que sería «difícil estropearlas aún más».