Río de Janeiro
La Policía brasileña dispersó con gases lacrimógenos una protesta en el centro de Río de Janeiro contra la propuesta del gobierno del presidente, Michel Temer de establecer un límite de gastos públicos para los próximos veinte años con base en la inflación del año precedente.
Cerca de 5.000 personas, según los organizadores (1.500 de acuerdo con la policía), se concentraron en la plaza carioca de la Cinelandia y de allí se movilizaron portando carteles contra la iniciativa del gobierno federal y reclamando la renuncia de Temer.
Cuando los manifestantes se desplazaban por la Avenida Chile, en la que quedan las sedes de la petrolera estatal Petrobras y del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) se presentó un altercado entre enmascarados que acompañaban la marcha y la Policía.
La Propuesta de Enmienda Constitucional (PEC) ya fue aprobada en la primera votación de la Cámara de Diputados, que deberá someterla a una segunda votación para remitirla al Senado, instancia en la que también deberá pasar por dos votaciones en el plenario para su aprobación definitiva.
La iniciativa prevé fijar un techo máximo de gasto con base en la inflación del año precedente por veinte años a partir de 2017, pero a la mitad de ese período esa fórmula de ajuste podría ser modificada.
Para el próximo año no está previsto que el ajuste sea aplicado a la salud, educación y programas sociales y comience a operar para esas áreas solo en 2018.
Las protestas contra la medida, convocadas en las redes sociales, se realizaron también en Belo Horizonte, capital del suroriental estado de Minas Gerais, y en San Pablo, la mayor ciudad del país, donde el abanderado de la manifestación fue el Movimiento de los Trabajadores Sin Techo (MTST).
Los Sin Techo, que piden soluciones a su problema de vivienda y acogieron la iniciativa contra la PEC, cerraron parcialmente la Avenida Paulista, frente a la sede regional de la Presidencia de Brasil, y luego se movilizaron pacíficamente hasta el centro de la ciudad, reportó EFE.
Los organizadores de la protesta en San Pablo señalaron que unas 15.000 personas participaron de la movilización.