Europa se prepara para una guerra de alta intensidad luego de que Ucrania lanzara sus primeros misiles ATACMS contra territorio ruso -con permiso de EEUU- y Vladimir Putin firmara un decreto que actualiza la doctrina nuclear que faculta el uso de armamento atómico incluso contra miembros de la OTAN. Pero Rusia también toma sus precauciones.

Por un lado, en un encuentro de Ministros de Defensa de la Unión Europea en Bruselas, el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, señaló: “estamos dispuestos a proporcionar lo necesario a Ucrania (…) porque es crucial que Putin no se salga con la suya, porque de lo contrario, tendríamos una Rusia envalentonada en nuestras fronteras”.  Rutte agregó que si Rusia triunfara en Ucrania, «ampliaría su territorio, aumentaría su capacidad miliar y estoy absolutamente convencido de que no se detendrá allí (…) tenemos que garantizar que Ucrania sea vencedora«, dijo en una rueda de prensa previa.

“Abordé los urgentes desafíos de seguridad con los ministros de Defensa de la UE. Recibimos una actualización de Ucrania . Nuestro apoyo es vital y debemos hacer más. También analizamos la necesidad de aumentar el gasto en defensa, además de trabajar #NATO y #EU para impulsar la industria de defensa”, publicó luego en su cuenta de X.

El jefe de la diplomacia de la UE, Josep Borrell, pidió a su turno que los países del bloque se sumen a Washington para que Ucrania use misiles de largo alcance en territorio ruso. «Espero que todos los Estados miembro (de la UE) sigan la decisión de Estados Unidos», declaró Borrell al llegar al encuentro. «El apoyo a Ucrania es uno de los ámbitos de cooperación más estrechos entre la UE y la OTAN. Avanzar en nuestro trabajo conjunto es crucial para Ucrania, la UE y la seguridad transatlántica y mundial en su conjunto«, posteó luego.

Rusia, mientras analiza su respuesta al primer ataque ucraniano con misiles en Briansk, comenzó la producción en masa de refugios antibombas móviles, “que pueden proteger contra una variedad de amenazas provocadas por el hombre y desastres naturales, incluida la radiación y las ondas de choque”, indicó el instituto de investigación del Ministerio de Emergencias. Los refugios se denominan «KUB-M», parecen containers y tienen capacidad para 54 personas, pero se pueden añadir módulos adicionales.

Suecia, a su vez, uno de los dos últimos miembros admitidos por la OTAN -el otro es Finlandia- se prepara para lo que pueda ocurrir. Son las dos naciones que se mantuvieron neutrales durante toda la existencia de la Unión Soviética y lo fueron de la Federación de Rusia hasta el estallido de la guerra en Ucrania. Suecia se incorporó en 2022 y Finlandia lo hizo en 2023.

En ese clima de crecientes tensiones con carácter incluso nuclear, la Agencia Sueca de Contingencias Civiles elaboró un material para que los ciudadanos sigan un protocolo en caso de que se desate un conflicto generalizado que involucre al país. “La situación de seguridad es grave y todos debemos fortalecer nuestra resiliencia para enfrentar diversas crisis y, en última instancia, la guerra”, dijo Mikael Frisell, director del organismo.

El proyecto consiste en la entrega de más de cinco millones de copias del documento, titulado «Si llega la crisis o la guerra», que ya está disponible en varios idiomas en línea. El texto llama a estar preparados con una reserva de alimentos y suministros de emergencia, entre ellos alimentos para bebés, medicamentos y productos de higiene. Finlandia también preparó un folleto con recomendaciones para el caso de una guerra.

ALG con NA, Sputnik y Europa Press