Venezolanos que habían emigrado a Argentina por la crisis económica que se vive en el país bolivariano, le piden a la cancillería que interceda con Caracas para ser repatriados, por la crisis que padecen acá a raíz de la pandemia. “No queremos ser una carga para el gobierno argentino”, cuenta Lenys Patricia Aguilera Suárez, que oficia como coordinadora de un grupo de cerca de 700 connacionales a la espera del regreso. Entre ellos, hay 277 que estaban de visita y con pasaje comprado cuando se decretó la cuarentena y no pueden volver porque las aerolíneas están paradas.
En una carta que mandaron al ministro de Relaciones Exteriores, Felipe Solá, le cuentan que “un grupo de nuestra comunidad venezolana se encuentra en situación de extrema vulnerabilidad y parte de ese grupo que mencionamos somos en estos momentos los que le escribimos”.
La misiva agrega que un cifra importante de venezolanos residentes en Argentina -si bien la mayoría está en Buenos Aires, los hay de todo el país- “no tienen los recursos económicos para adquirir un boleto de regreso, ya que ni siquiera está contando con los recursos económicos para sobrevivir en estos tiempos”.
En el caso concreto de Aguilera Suárez, ella dice que allá era contador público y acá hacía trabajos “en negro” en casas particulares. Pero ya no puede seguir sosteniendo un alquiler y enfrenta la presión de quedar en la calle en cualquier momento, cuando todavía no llegó todo el rigor del invierno. “Al menos en Venezuela tengo familia y una vivienda”, resume.
La carta a Solá relata que en medio de la cuarentena, a la mayoría de los venezolanos “les cuesta cada vez más conseguir alimentos, otros no cuentan con un DNI o ni siquiera con una (residencia) precaria y algunos ya se encuentran en situación de calle o en albergues transitorios. Sentimos que estamos quedando expuestos al contagio del Coronavirus y no tenemos a quien acudir para solventar nuestra situación”.
Para colmo de males, la embajada de la República Bolivariana, ubicada en el barrio porteño de Palermo, encuentra cerrada y no tienen con quién hablar. “No hay personal que pueda atender nuestras necesidades”, afirman,
Es que durante la administración de Mauricio Macri, en el marco de la ofensiva de la Casa Blanca, gobiernos de derecha latinoamericanos y la OEA contra el presidente Nicolás Maduro, se reconoció como mandatario al diputado Juan Guaidó y como representante emn Buenos Aires a Elisa Trotta.
Pero Guaidó nunca tuvo control del aparato estatal. En estas circunstancias, el único que puede hacerse cargo de la repatriación es el gobierno de Maduro.
“El único medio de contacto que tenemos con nuestro gobierno es mediante un correo electrónico del despacho del Embajador, emplazado por ellos, -destaca el texto enviado a Solá- donde la única respuesta que hemos recibido es que nos registraron en un listado de varados en Argentina, y que ellos solo esperan alguna instrucción desde Caracas”.
A continuación señalan que “dichas respuestas evidentemente reflejan lo desprotegidos que nos encontramos en estos momentos; merecemos ser escuchados y atendidos. Sabemos que no hay Embajador y no tenemos cómo comunicarnos con Cancillería en Caracas”.
Por tal razón, le piden a las autoridades argentinas, que desde la llegada de Alberto Fernández a la Casa Rosada intenta promover una salida civilizada para la crisis venezolana, que medien para “la habilitación de un canal humanitario que nos permita regresar a nuestros hogares por medio del «Plan Vuelta a la Patria» del gobierno venezolano y tener la tranquilidad de estar rodeados de nuestros afectos”.
Desde que comenzó a rodar este pedido, que se canaliza a través del celular 11 5744 6408, cuenta Aguilera Suárez, se fueron incrementando los pedidos de “Venezolanos varados en argentina”.