La comunidad educativa de Colombia volvió a manifestarse esta semana en todo el país para exigir un aumento en los recursos para las universidades públicas, aunque no logró doblegar al gobierno derechista de Iván Duque que aprobó el presupuesto 2019 sin incluir los pedidos de estudiantes, profesores y dirigentes de la oposición. A pesar de que el gobierno anunció como «histórica» la partida destinada a educación, de alrededor de 13.500 millones de dólares (unos 1300 millones más que el año pasado), Duque ya había anunciado que destinaría justamente 1300 millones a las universidades públicas. Sin embargo la Unión Nacional de Estudiantes de la Educación Superior (UNEES), que reúne a más de 50 entidades públicas, exigía 1500 millones de dólares a este sector, un alza de cerca de 230 millones respecto de 2018.
Los dirigentes de la izquierda, opositores al gobierno, como la exsenadora Piedad Córdoba y el senador y oponente de Duque en el balotaje, Gustavo Petro, criticaron además que la mayor parte del presupuesto esté destinada en proporciones asimétricas al pago de la deuda y el área de defensa. «Necesitamos menos balas y más educación», dijo Petro en su discurso de la sesión del miércoles en el Senado.
La masiva marcha estudiantil se había producido el mismo día en distintas ciudades, bajo los lemas «La esperanza es la educación» y «SOS Universidades Públicas». Los alumnos repitieron la jornada una semana atrás en la que más de 100 mil estudiantes protestaron en las principales ciudades.
La comunidad universitaria asegura que las instituciones estatales tienen un déficit de funcionamiento de unos 1000 millones de dólares y que el Estado les adeuda cerca de 5000 millones en infraestructura y formación de docentes.