El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, juró este mediodía ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) para un nuevo período de gobierno hasta 2025. «Juro en nombre del pueblo de Venezuela, juro por el legado de nuestros antepasados (…) juro por el legado de nuestro amado comandante Hugo Chávez, juro por los niños y niñas de Venezuela, juro que no daré descanso a mi brazo ni reposo a mi alma», afirmó Maduro ante el magistrado Maikel Moreno y antes de recibir la banda presidencial.
El mandatario se comprometió a cumplir «todos los postulados de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela para procurar defender la independencia absoluta de la Patria y construir el socialismo del siglo XXI». Y agregó: “Como locos andan los gobiernos satélites del imperialismo inventando, presionando, gritando”.
Previamente, el magistrado Moreno, presidente del TSJ, destacó que Maduro fue electo con el 67,84 por ciento de los votos favorables en las elecciones realizadas el 20 de mayo de 2018 y subrayó que «el pueblo venezolano, fiel a su tradición republicana, dejó un claro ejemplo de civismo, democracia y madurez política».
Moreno subrayó que se trató de un «proceso electoral libre y soberano», y destacó que la población venezolana «priorizó la actividad del sufragio como única forma constructiva para consolidar la democracia».
De acuerdo con la Constitución de Venezuela, los presidentes electos deben juramentar ante la Asamblea Nacional (Parlamento unicameral). Sin embargo, esta vez la ceremonia se realizó ante el TSJ con base al artículo 231 de la Carta Magna que recomienda seguir este procedimiento «si por cualquier motivo sobrevenido el presidente o presidenta de la República no pudiese tomar posesión ante la Asamblea Nacional».
Sobre el actual Parlamento, de mayoría opositora, pesa una sentencia de desacato del TSJ, que lo acusa de desconocer las decisiones del resto de los poderes desde mediados de 2016, por lo que todas sus acciones son consideradas como «nulas» e «írritas».
La ceremonia coincidió con un plenario en Washington de la Organización de Estados Americanos (OEA) aprobó una resolución que declara ilegítimo al nuevo gobierno de Maduro.
Además, el gobierno de Paraguay rompió relaciones diplomáticas con Venezuela.