El presidente electo de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, acusó este jueves al mandatario Jair Bolsonaro de utilizar de forma «humillante» a las Fuerzas Armadas en el monitoreo de las máquinas de votación electrónica, a la vez que lloró en público al reiterar su compromiso por erradicar el hambre en el país, y aseguró que si se cumple durante su mandato habrá alcanzado «la misión» de su vida.
«Ayer -por el miércoles- sucedió algo humillante, deplorable para nuestras Fuerzas Armadas: un presidente de la República, que es el jefe supremo de las Fuerzas Armadas, no tenía derecho a involucrarlas en hacer una comisión para investigar las máquinas de votación electrónica, algo que es de la sociedad civil, de los partidos políticos y del Congreso Nacional», dijo el presidente electo en un discurso a parlamentarios aliados en Brasilia.
Las críticas de Lula apuntan a que Bolsonaro utilizó el Ministerio de Defensa, del que dependen las Fuerzas Armadas, para vehiculizar sus ataques contra el sistema electoral brasileño, al incluirlo en la auditoría de la elección realizada desde la Comisión de Transparencia Electoral del Tribunal Superior Electoral (TSE).
El líder del Partido de los Trabajadores (PT) además le exigió al presidente Bolsonaro que pida disculpas a las Fuerzas Armadas por utilizar a los militares en este proceso, y a los brasileños, por haber mentido.
«El resultado fue humillante, humillante. No sé si el presidente está enfermo, pero tiene la obligación de venir a la televisión y disculparse con la sociedad brasileña y disculparse con las Fuerzas Armadas, por haber utilizado las Fuerzas Armadas, que es una institución seria, (…) presentando un informe que no dice nada, nada, absolutamente nada de lo que ha acusado durante tanto tiempo», aseveró, según recogió el diario Folha de Sao Paulo.
En concreto, Lula se refirió al informe que presentó el miércoles dicho Ministerio al TSE sobre los resultados de la auditoría del funcionamiento del sistema de elecciones en las recientes presidenciales, en el que, si bien sugirió algunas modificaciones, no mencionó fraude ni otros delitos.
De todos modos, los militares criticaron puntos que consideran insuficientes para lo que estiman sería una inspección completa del proceso. En definitiva, no cuestionaron completamente el sistema ni dieron fe de su integridad.
El presidente del tribunal, Alexandre de Moraes, agradeció al Ministerio de Defensa por el envío del informe y dijo que «el TSE reafirma que las máquinas de votación electrónicas son motivo de orgullo nacional, y que las elecciones de 2022 demuestran la eficacia, equidad y total transparencia en el cómputo de los votos».
Sin embargo, lejos de quedar zanjada la polémica en torno a la integridad de los comicios, el Ministerio de Defensa remarcó hoy que su informe sobre el sistema de votación no excluye la posibilidad de un fraude.
«Para evitar que se distorsione el contenido del informe (…) el dedicado trabajo del equipo de técnicos militares en la fiscalización del sistema electrónico de votación, aunque no lo haya indicado, tampoco excluye la posibilidad de existencia de fraude o inconsistencia en las urnas electrónicas en el proceso electoral de 2022», informó el organismo en un comunicado oficial citado por la agencia de noticias Sputnik.
El texto también habla de la falta de comprobaciones suficientes para descartar la posible influencia de un código maligno capaz de alterar el sistema, así como restricciones a un adecuado acceso de los técnicos al código fuente (el mecanismo que hace funcionar las urnas) y a las bibliotecas de software desarrolladas por terceros.
Por todo ello, el Ministerio de Defensa recordó que solicitó al TSE «con urgencia» una investigación técnica sobre los códigos que realmente fueron ejecutados en las urnas y una comisión específica de especialistas de renombre de la sociedad y de entidades fiscalizadoras.
En otro orden, Lula pidió a los partidarios de Bolsonaro que desconocen el resultado de la elección y protestan frente a los cuarteles, exigiendo la intervención militar, que se dispersen.
«Ni siquiera saben lo que están pidiendo. Si pudiera decirle algo a esta gente, (diría) que se vayan a su casa. La democracia es eso, uno gana y el otro pierde», señaló.
Y agregó: «Solo le pido a la gente que respete el resultado electoral, porque ganamos las elecciones y vamos a recuperar este país», dijo.
En su discurso, el próximo mandatario elogió al máximo juez del TSE, Moraes, por su desempeño en la campaña electoral.
Erradicar el hambre, «la misión de mi vida», según Lula
En el mismo encuentro de Lula con los parlamentarios, que tuvo lugar en el Centro Cultural Banco do Brasil (CCBB), edificio donde se concentran los equipos de trabajo de la transición, lloró al hablar de su compromiso con el combate al hambre en el país.
«Si cuando termine este período, todos los brasileños toman café, almuerzan y cenan, una vez más habré cumplido la misión de mi vida», dijo Lula y comenzó a llorar mientras era aplaudido por los presentes, reportó el portal G1.
«Lo siento, pero el caso es que nunca esperé que el hambre volviera a este país. Cuando dejé la Presidencia de la República imaginé que en los siguientes diez años este Brasil sería igual a Francia, sería igual a Inglaterra, habría evolucionado desde el punto de vista de las conquistas sociales», añadió.
Según la Encuesta Nacional de Inseguridad Alimentaria en el Contexto de la Pandemia de Covid-19, más de 30 millones de personas pasan hambre en Brasil.
La de hoy fue la primera vez en que el presidente electo visitó la CCBB. Desde el martes se encuentra en Brasilia, donde ayer sostuvo reuniones con los ministros del Supremo Tribunal Federal (STF), con el presidente del TSE, y los presidentes de la Cámara de Diputados y del Senado, Arthur Lira y Rodrigo Pacheco, respectivamente.