En la esperada conferencia de prensa del presidente Donald Trump sobre la escalada de violencia con Irán, el mandatario advirtió que «Irán tiene que dejar de lado sus ambiciones nucleares y dejar de apoyar el terrorismo” y alertó a las potencias europeas a alinearse con su posición. Además adelantó que le impondrán sanciones económicas a y desde el inicio de su alocución señaló que «Irán nunca tendrá el arma nuclear mientras yo sea presidente de los Estados Unidos».
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Trump defendió su decisión de asesinar al general iraní Qassem Soleimani al calificarlo como el “mayor terrorista del mundo”, y adujo que en los últimos días “estaba planeando nuevos ataques”. En tanto, aseguró que la represalia iraní sobre las bases iraquíes con personal norteamericano “no dejó heridos”.
Alejado del tono más provocador que lo distingue, Trump manejó un discurso contenido. Una gran parte de las palabras del jefe de la Casa Blanca estuvo dedicada a alabar el poderío militar de Washington, aunque dijo que poseer el poderío no significa que lo utilizarán. Asimismo reclamó a Alemania, Reino Unido, Francia, Rusia y otras potencias a “apartarse del acuerdo nuclear” firmado entre Irán y esas potencias. El expresidente Barack Obama había rubricado ese pacto pero Trump se retiró del mismo en 2018. En este sentido, adelanto: “Voy a pedirle a la OTAN que se involucre más en el proceso de Medio Oriente”.
El jefe de Estado norteamericano decidió no escalar en el conflicto pero dejó en claro la posición de su administración: “Hemos tolerado la actitud destructiva y desestabilizadora de Irán en Medio Oriente durante demasiado tiempo. Esos tiempos han terminado”.