Se aseguraba que Joe Biden elegiría a una mujer para compañera de fórmula. En tiempos en que las cuestiones de género tienen preponderancia, sería la fórmula ideal para los que tejen estrategias en los escritorios del partido demócrata. Y los nombres comenzaron a sonar con insistencia. Elisabeth Warren era la preferida de los sectores inclinados a la izquierda que se quedaron con ganas de votar a Bernie Sanders cuando se bajó de la contienda en abril pasado. Pero el establishment del partido demócrata no aceptaba a alguien que pudiera torcer la balanza de semejante modo, a pesar de que la senadora por Massachusetts no pasaría de ser una tímida progresista en esta parte del mundo. Luego del asesinato de George Floyd, además de mujer, la compañera de fórmula debía ser negra. Y el personaje ideal para esa función resultó ser la ex fiscal General y actual senadora por California, Kamala Harris.
Entre las virtudes adicionales de esta hija de un jamaiquino y una india tamil, está su edad, 56 años. Biden, a los 77, es el más viejo de los contendientes que en noviembre se disputarán la presidencia y además, tiene la salud bastante menguada como para que los malpensados teman por su fortaleza para enfrentar la situación que atravieza el país. Donald Trump, que va por la reeleción, tiene 74 años pero se lo suele ver rozagante. Su punto en contra es el manejo de la pandemia y su enfrentamiento con lo que llama «el estado profundo», sectores entre los que se cuentan los funcionarios del Departamento de Estado, de las agemncias de inteligencia, el Pentágono y tambien el aparato industrial militar y los medios hegemónicos.
Harris, además, en su paso por la justicia es recordada como esos funcionarios que se pasan de estrictos. Al mismo tiempo, es considerada una defensora de los afrodescendientes y de los más pobres, en un estado que suele votar a los demócratas, tiene un perfil políticamente liberal y donde ella llegó a ser Fiscal General entre 2011 y 2017 para de allí saltar a la cámara alta
«Tengo el gran honor de anunciar que elegí a @KamalaHarris, una combatiente intrépida a favor de los más débiles y una de las mejores servidoras que tiene este país», anunció Biden este martes.
Biden encabeza las encuestas para las elecciones del próximo 3 de noviembre, unos comicios marcados por la pandemia y la crisis económica que sufre Estados Unidos con un desempleo que supera el 10%.
Harris será la tercera candidata a la vicepresidencia en la historia de Estados Unidos, luego de la demócrata Geraldine Ferraro en 1984 y de la republicana Sarah Palin en 2008. Y lo es cuatro años después de que Hillary Clinton se convirtiera en la primera nominada a la presidencia. Ninguna de ellas llegó a la meta final.
Desde la campaña de Trump sacaron a relucir que durante las primarias, Harris fue la que con mayor dureza atacó a Biden, al que no dudó en calificar de racista. Pero se sabe que en todos lados se cuecen habas y ahora irán juntos para tratar de destronar al empresario inmobiliario.