Mientras el gobierno venezolano celebraba la llegada del primer buque petrolero proveniente de Irán para abastecer de combustible al país bolivariano, un tribunal de Delaware, el paraíso fiscal estadounidense, aprobó la venta de Citgo Petroleum, la filial de PDVSA en ese país, una medida confiscatoria destinada a asfixiar aún más al gobierno de Nicolás Maduro.
Durante todo el fin de semana la tensión en el Caribe estuvo al máximo nivel luego de las amenazas del presidente Donald Trump de no permitir el ingreso de los buques enviados por Teherán para paliar la grave situación que vive Venezuela a raíz del bloqueo estadounidense.(Ver acá)Trump incluso había advertido que “algo” iba a suceder estos días en relación con el país caribeño. Pero o la amenaza tenía que ver con la decisión de la corte de Delaware o el Pentágono no quiso saber nada con atacar a los petroleros, que además fueron escoltados cuando ingresaron en aguas jurisdiccionales por aviones caza Sukhoi de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana.
Tropas estadounidenses contagiadas de Covid-19
El buque Fortune y el Forest ingresaron el sábado de madrugada mientras se espera la llagada del convoy restante, integrado por por tanqueros Petunia, Faxon y Clavel. «Vamos a continuar escoltando por aire y por mar a todos los buques», dijo el jefe del Comando Estratégico Operacional de la FANB, almirante Remigio Ceballos. La flota transporta unos 1,5 millones de barriles de gasolina, el equivalente de más de un mes de consumo de Venezuela en estos tiempos de pandemia.
Precisamente la falta de combustible por el bloqueo al que EEUU somete a Venezuela incrementa el peligro de no poder responder ante la emergencia sanitaria. El estrangulamiento del pais forma parte de la estrategia de guerra puesta en marcha por la Casa Blanca, ya desde tiempos de Barack Obama en el poder.
Pero con el empresario imobiliario en el Salón Oval, la seguidilla de gobiernos de derecha latinoamericanos se sumó sumisa a la ofensiva sobre el gobierno de Maduro. Salvo México tras la llegada de Andres Manuel Lobez Obrador y de la Argentina con Alberto Fernández, que mantienen el compromiso de impulsar negociaciones pacíficas y rechazan una incursión armada como planifican tanto Trump como el colombiano Ivan Duque y el brasileño Jaiur Bolsonaro.
Los venezolanos se mantienen, a pesar de la adversidad, dentro de la legalidad bolivariana e incluso muchos antichavistas ahora reniegan del diputado Juan Guaidó, autoproclamado presidente interino, porque con su apoyo a las sanciones y el bloqueo no hace sino agravar la situación de los residentes.
Organizaciones como Human Right Watch y la Universidad Johns´s Hopkins -que anota cada día las cifras de víctimas de coronavirus en el mundo- lanzaron el aviso de que los números que muestra el gobierno no pueden ser ciertos. Los datos oficiales hablan de 1.180 contagiados y 10 muertos. Para HRW y JHU los muertos deberían ser al menos 30.000, aunque no hay certeza de cómo hacen el conteo.
No aceptan la información oficial porque entienden que no pueden ser ciertas en el marco del bloqueo que promueve EEUU,al que sin embargo no denuncian. Los gobiernos más aguerridamente antichavistas, Brasil y Colombia, tienen 375.000 contagiados y 24.000 muertos en el primer caso y 22.000 enfermos y 750 víctimas fatales en el segundo, según los datos oficiales de cada administración.
El caso es que si Venezuela puede tener un respiro tras la llegada del combustible iraní, la ofensiva sobre Caracas prosigue en los despachos judiciales. El gobierno denunció como acto de «piratería moderna» el fallo que aprobó la venta de Citgo. El ataque a la petrolera estatal, principal fuente de ingreso de Venezuela, comenzó hace un par de años.
Un émulo de Griesa contra Venezuela
Trump bloquea las cuentas de CITGO
Un cable de la agencia rusa Sputnik informa que la Contraloría General de Venezuela denunciará ante la Organización de Naciones Unidas (ONU) el remate de lla petrolera estatal, una acción que cuenta con la anuencia de Guaidó, quien para los países que impulsan el cambio de régimen en Venezuela es el que debe administrar esos activos.
«Vemos cómo el señor Juan Guaidó en combinación con el Gobierno de Donald Trump remata bienes del Estado venezolano de la empresa Citgo Petroleum perteneciente al pueblo de Venezuela y PDVSA (…) La Contraloría General de la República hace esta denuncia y la elevará a la ONU en Viena, a fin de que se considere en la próxima convención internacional para alertar a los países del mundo», expresó el contralor Elvis Amoroso.
La Fiscalía General del país, en esa misma línea, pidió al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) declarar como «organización terrorista» al partido político Voluntad Popular, al que pertenece Guaidó, al que se acusa de haber organizado la incursión mercenaria de principios de mayo desde Colombia. (Ver acá)
La vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, denunció también a Guaidó. «Pretende robarse el oro que tiene Venezuela en Inglaterra. Pensaban hacer acá lo mismo que en Libia si hubiese sido exitosa la incursión del 3 de mayo», indicó Rodríguez al canal estatal Venezolana de Televisión.
Caracas presentó una demanda ante tribunales ingleses ante la negativa del Banco de Inglaterra de devolver las reservas depositadas por el Banco Central de su país. Se trata de más de 1.200 millones de dólares en lingotes de oro que depositados durante la presidencia de Hugo Chávez y que forman parte de las reservas del Banco Central de Venezuela (BCV), aclara un eçdespacho de Sputnik.