Los líderes de los 46 países del Consejo de Europa (CdE) se reúnen este martes en Islandia para una cumbre de dos días que busca exhibir unidad frente a Rusia en la guerra con Ucrania, un año después de la exclusión de Moscú de este organismo, el más importante de Europa para la defensa de los derechos humanos.
La cumbre en Reikiavik, capital de Islandia, es la cuarta de la organización paneuropea en sus casi 75 años de existencia, totalmente independiente de la Unión Europea (UE), y los 46 miembros debatirán fórmulas para que Rusia responda legalmente por la invasión iniciada el 24 de febrero de 2020.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, está invitado a participar por videoconferencia, según fuentes británicas, tras su gira europea que lo llevó esta semana a las capitales de Italia, Alemania, Francia y Reino Unido.
Zelenski dijo ayer en Twitter que volvía «a casa» con la promesa «de nuevas y poderosas armas», en un momento en el que se espera que su país lance una contraofensiva contra las fuerzas rusas.
El jefe de Gobierno alemán, el canciller Olaf Scholz; el presidente francés, Emmanuel Macron; el primer ministro británico, Rishi Sunak, y su par italiana, Giorgia Meloni, quienes se entrevistaron en los últimos días con Zelenski, estarán también presentes en Reikiavik.
«Seguiremos apoyando a Ucrania el tiempo que sea necesario», reafirmó ayer la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
«No se hará nada sobre Ucrania sin Ucrania», prometió la jefa del brazo ejecutivo de los 27, en momentos en que Kiev teme que sus aliados presionen al país para que negocie con Moscú si no logra éxitos militares rápidamente.
Islandia, país anfitrión, espera que la cumbre produzca «resultados tangibles».
El país insular nórdico tuvo que traer refuerzos policiales del extranjero para organizar esta cita en su tranquila capital.
Islandia dijo que se buscara establecer un «registro de los daños» causados por la invasión rusa, dos meses después de que la Corte Penal Internacional (CPI), con sede en La Haya, emitiera una orden de arresto contra el presidente ruso, Vladimir Putin.
Rusia, como Estados Unidos y China, no aceptan la jurisdicción de este tribunal internacional.
El registro será «un primer gran paso hacia las indemnizaciones» exigibles a Rusia, según Von der Leyen, quien defiende la creación de un tribunal especial para crímenes de guerra en Ucrania.
Von der Leyen, el Reino Unido y Estados Unidos -que tiene estatus de observador en el Consejo de Europa- defienden crear un nuevo registro de daños en La Haya que recabe los daños con miras a la creación del tribunal especial.
En una mesa redonda, seguida de una cena de los dirigentes europeos, los líderes conversarán sobre «cómo puede ayudar activamente el Consejo de Europa a los ucranianos como miembros de esta gran familia democrática europea», dijo la Presidencia de Francia.
Rusia fue miembro hasta marzo de 2022 del Consejo de Europa, uno de los pocos foros que agrupaba a los europeos y en el que también participaba Moscú.
Moscú también fue marginada del Consejo del Ártico y ahora sólo está presente en la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).
El Consejo de Europa tiene como misión promover los derechos humanos, la democracia y el Estado de Derecho en sus estados miembros, que incluyen el bloque de los 27 más el Reino Unido, Turquía, países de los Balcanes occidentales, Georgia y Armenia.
Este foro es sobre todo conocido por su jurisdicción, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH).
El Consejo de Europa, que no está exento de fisuras internas, reunirá en esta oportunidad a dos países en conflicto, Azerbaiyán y Armenia.
Según Islandia, en la cita también serán abordados temas como el «retroceso democrático en Europa» y asuntos de actualidad, como el avance de la Inteligencia Artificial (IA).
La cita es también un preludio de la cumbre del G7, que comienza este viernes en Japón, donde Macron, Sunak, Scholz y Meloni tienen previsto reunirse, entre otros, con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden.