Las imágenes provenientes de algunas capitales europeas pueden llamar a engaño. Ese regreso a las playas, o que algunos cafés parisinos, los subtes alemanes, las callecitas italianas se vayan repoblando paulatinamente. Pero eso no significa, ni por mucho, que la pandemia del Covid-19 haya sido superada. Las noticias de rebrotes en el mundo se replican en los informativos y se complementan con un dato que confirmó el director de la OMS, el etíope Tedros Adhanom Ghebreyesus: en los últimos días, el registro de los nuevos infectados por el virus creció hasta superar los 150 mil casos globales diarios. No durante una jornada, sino en varias consecutivas, lo que da una idea de que no se trata de un hecho aislado.
Al cierre de esta nota, las cifra de contagiados dada por el Instituto Johns Hopkins ronda los 8,7 millones. Un dato que da idea del crecimiento es que el último millón se sumó en sólo una semana. La suba de 5 a 6 millones tardó nueve días; de 4 a 5, demoró once y de 3 a 4, 13. El primer millón de contagiados se registró el 2 de abril, hace 70 días. El 20 de marzo, cuando la cuarentena se anunció en la Argentina, el mundo contabilizaba 272.167 contagiados y 11.299 muertos. Hoy la cifra de víctimas fatales supera los 465 mil. Esa curva también viene creciendo, aunque con picos intermitentes y con un promedio diario de un poco más de 5000 fallecidos en todo el mundo.
Por supuesto que se está lejos de los 500 millones de contagiados y 50 millones de muertos que provocó la llamada “gripe española” en 1918. Pero también la humanidad es otra muy distinta, más de un siglo después.
Esto ocurre cuando en la Argentina se rompe la barrera de los 2000 casos nuevos por cada día. No es casual. Ese crecimiento de la magnitud de infectados se nota claramente en algunos países de América, aunque no sean los únicos.
La suba de casos, fundamentalmente en el AMBA argentino se suma a la problemática chilena y boliviana (ver páginas 24 y 25), la brasileña (página 27) que venció la barrera del millón de casos y se encuentra sólo debajo de Estados Unidos en la funesta tabla planetaria. Pero los ejemplos de Perú (244 mil infectados y unos 8000 muertos), Colombia (63 mil; 2000) y Ecuador (50 mil ; 5000) son graves también por la endeble infraestructura sanitaria de esos países y porque además se cuestiona seriamente su modo de conteo, con lo que se descuenta que las cifras son realmente muy superiores.
Pero además, en muchas partes del mundo se denunciaron rebrotes del incontrolable Covid-19, lo que en algún caso obligó a dar marcha atrás en procesos de apertura y disparó alarmas sobre la anunciada liberación de fronteras. Da prueba de ello al menos una decena de naciones: Alemania, China, Corea del Sur, Irán, Israel, Grecia y Portugal, entre otras. Claro que también se producen los llamados “rebrotes controlados”, como acusa España. Las autoridades dicen haber registrado 34 rebrotes desde el 11 de mayo. Por caso, tras haber recibido hace pocos días los primeros visitantes procedentes de Alemania. Ya anunció que si bien seguirá el proceso de apertu-ra de fronteras, pospondrá la que tiene con Portugal, a pedido del propio gobierno luso, que registró más de 400 casos en las últimas horas, una cifra muy inferior a la que venía soportando. Además, uno de los focos se advirtió en Lisboa, ciudad en la que el virus había tenido escasa incidencia.
Más grave parece ser el caso de Alemania, que anunció arriba de un millar de casos en una empresa de chacinados de Rheda-Wiedenbrück; otro centenar en Gotinga con la consecuencia de 700 personas en cuarentena y focos menores que pusieron en alerta al gobierno.
De China surgió este virus. El último día del año pasado, hace 172, se dio la primera alerta. Sufrió más de 83 mil casos y casi 4,7 mil muertos. Parecía haber superado la pandemia tras 55 días sin contagios locales. Pero hace pocas horas se detectaron 180 positivos en un mercado de Pekín que obligaron a severas medidas de restricción por 30 días, además de cancelar un millar de vuelos, suspender el reinicio de clases y recomendar nuevamente el teletrabajo.
Corea del Sur, por su parte, registró otro rebrote que no llega a ser tan grave como el de fines de mayo porque parece circunscribirse a Seúl, pero se prendió la alarma, igual que en países como India o Pakistán, que se encuentran entre los que más casos debieron soportar. Lo mismo se observa en países como Israel, Turquía y Grecia, que venían levantando progresivamente su confinamiento en las últimas semanas, pero que registraron nuevos casos. Israel volvió a tener un promedio de cien casos por día y determinó el nuevo cierre de comercios y severas restricciones en los aeropuertos de ciudades como Jerusalén o Tel Aviv. «
8,7 MILLONES
de contagiados y más de 462 mil muertos son las últimas cifras oficiales, aunque se sospecha que las reales son muy superiores.
HAMBRE
El caso de Perú es un espejo de la región: en las últimas horas se reiteraron los reclamos de asistencia alimentaria más allá de la sanitaria por la cuarentena.