La Conferencia Episcopal Italiana (CEI) anunció que realizará un estudio sobre la pedofilia dentro de la Iglesia de ese país, que abarcará dos décadas desde 2000 a 2021, como respuesta a los pedidos de las asociaciones de víctimas, que sin embargo vienen sosteniendo el pedido de una investigación independiente. «Es nuestro deber ante tanto sufrimiento», reconoció ante la prensa el nuevo presidente de la CEI, cardenal Matteo Zuppi, conocido por sus posiciones progresistas y designado el martes pasado por el papa Francisco como líder de la iglesia italiana.
El estudio «se llevará a cabo en colaboración con institutos de investigación independientes, lo que permitirá un conocimiento más profundo y objetivo» del fenómeno, sostuvo la CEI en un comunicado. Los datos serán facilitados por la Congregación para la Doctrina de la Fe, la entidad vaticana responsable de las denuncias de abusos en la Iglesia católica. «Eso permitirá mejorar las medidas de prevención y control y dar apoyo a las víctimas y sobrevivientes gracias a un mayor conocimiento», explicó.
La CEI se comprometió también a multiplicar los centros de escucha de las diócesis, que actualmente cubren el 70% del país, y a elaborar un primer informe nacional sobre los casos denunciados durante los últimos dos años, según informó la agencia de noticias AFP. Sin embargo, el anuncio sobre el estudio decepcionó a las organizaciones de víctimas que exigen una «investigación independiente» porque temen que muchos casos sean olvidados.
Francesco Zanardi, fundador de la asociación de víctimas «Rete L’Abuso» (Red El abuso), quien sufrió abusos durante la adolescencia por parte de un cura, dijo que el estudio reportaría sólo una parte del fenómeno. Estudiar los casos sólo a partir del 2000 es «discriminatorio» y «excluye muchos casos, incluido el mío», afirmó a la AFP Zanardi, quien estimó que el número de personas que sufrieron abusos por parte de curas en Italia podría llegar a sumar «un millón».
El pasado 16 de mayo, asociaciones, abogados y periodistas reunidos en el movimiento «ItalyChurchToo» («La Iglesia de Italia también») pidieron en una carta abierta una investigación independiente «realizada por profesionales imparciales y de alto nivel», que tenga en cuenta la influencia histórica de la Iglesia y de los católicos en la península.