Bávaro, República Dominicana
Los países de América Latina y el Caribe instaron al gobierno y a la oposición venezolana a retomar el diálogo para resolver la grave crisis política, y a cumplir los acuerdos sin dilaciones.
«Alentamos a las partes a realizar gestiones para lograr resultados concretos, así como a cumplir sin dilación los acuerdos alcanzados hasta ahora», señala el segundo punto de la declaración final de la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), que concluyó en República Dominicana.
Integrada por 33 países, la Celac hizo votos para que las conversaciones se reanuden con «pleno apego al Estado de derecho, a los derechos humanos y a la institucionalidad democrática, especialmente a la separación de poderes».
Las negociaciones que impulsan el Vaticano y la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) comenzaron el pasado 30 de octubre, pero la oposición decidió congelarlas el 6 de diciembre alegando que el gobierno del presidente Nicolás Maduro ha incumplido lo pactado.
La coalición Mesa de la Unidad Democrática (MUD) exige un adelanto de las elecciones presidenciales, previstas para diciembre de 2018, como vía para resolver la crisis, pero Maduro descarta por completo esa posibilidad.
La conflictividad política se agudizó luego de que la MUD asumiera el control del Parlamento hace un año.
Enfocada en encontrar un mecanismo que anticipara la salida del poder de Maduro, la Asamblea legislativa fue quedando maniatada por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), que ha anulado prácticamente todas sus decisiones.
El país petrolero enfrenta además una profunda crisis económica, que se refleja en una profunda escasez de alimentos y medicinas.
La «Declaración de Punta Cana» dedicó otro aparte a Venezuela, para exigir que Washington revierta un decreto de 2015 que considera a ese país como una «amenaza inusual y extraordinaria» para la seguridad de Estados Unidos.