Tras los últimos bombadeos, Israel promete «más sorpresas en la manga» para las milicias de Hezbolá. El ministro de Defensa, Yoav Gallant, aseguró este viernes que la invasión de las fuerzas israelíes en el sur del Líbano proseguirá «donde haga falta» hasta que la infraestructura del partido-milicia chiíta quede destruida.
«Hezbolá se está llevando golpes muy duros, uno tras otro. Hemos eliminado a su líder, Hasán Nasralá, y tenemos más sorpresas en la manga, algunas de las cuales ya hemos dado, otras de las cuales vamos a dar», declaró Gallant durante una visita al cuartel general de la 36ª División del Ejército israelí, que participa en la invasión del sur de Líbano.
El objetivo de uno de los bombardeos ejecutados el jueves por el Ejército de Israel contra la capital de Líbano, Beirut, habría sido Hashem Safiedín, primo del fallecido secretario general del partido-milicia chiíta Hezbolá, Hasán Nasralá, y uno de los principales favoritos a sucederle en el cargo.
Fuentes oficiales israelíes citadas por el diario estadounidense ‘The New York Times’ especificaron que Safiedín se encontraba en un edificio atacado a última hora del jueves, poco después de que el Ejército emitiera una orden de evacuación para los residentes en la zona.
Fuentes israelíes citadas por el portal de noticias Axios también especificaron que Safiedín se encontraba en un búnker muy profundo en el lugar, sin que por ahora haya informaciones sobre si ha muerto en el ataque.
De hecho, fuentes de Hezboláh indicaron en declaraciones concedidas al diario libanés ‘L’Orient le Jour’ que por ahora «no hay información» que facilitar sobre Safiedín tras el bombardeo, uno de los más intensos lanzados por Israel contra Beirut desde la intensificación de su campaña de ataques hace más de dos semanas.
Safiedín fue incluido en mayo de 2017 como un «terrorista especialmente designado» en la lista del Departamento de Estado de Estados Unidos. El ataque sería parte de los intentos de Israel de descabezar totalmente Hezbolá, en este caso acabando con el potencial sucesor de Nasralá antes incluso de su nombramiento.
El hombre fue uno de los principales integrantes de Hezbolá tras unirse al grupo a raíz de su formación en los años ochenta, después de la invasión militar lanzada por Israel en 1982, que se extendió hasta el año 2000. Safiedin tuvo un papel relevante a nivel político y espiritual del grupo, siendo una persona cercana a Nasralá y estando implicado también en los preparativos de sus operaciones militares.
El ‘número dos’ del partido-milicia chiíta, Naim Qasem, afirmó el lunes que el grupo elegirá «lo antes posible» a su nuevo líder y destacó que la formación «está preparada» para hacer frente a las tropas israelíes en caso de que lancen una ofensiva terrestre, algo que se materializó finalmente en la madrugada del martes, cuando Israel inició una nueva invasión del país.
El repunte de las hostilidades se enmarca en los enfrentamientos desde hace cerca de un año, después de que Hezbolá atacara territorio israelí un día después de los ataques perpetrados el 7 de octubre de 2023 por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) y otras facciones palestinas, que llevaron a Israel a desatar una cruenta ofensiva contra la Franja de Gaza.
Las autoridades de Líbano han elevado a cerca de 2.000 el balance de muertos, entre ellos 127 niños, a causa de los ataques ejecutados por el Ejército de Israel desde hace casi un año, en el marco de los combates desatados el 8 de octubre de 2023
bb con Europa Press