Luego del anuncio de renuncia de Evo Morales a la presidencia de Bolivia, el vicepresidente de Álvaro García Linera presentó también su dimisión al cargo de segundo mandatario del Estado.
«Hoy estoy renunciando a mi cargo de vicepresidente, el golpe de estado se ha consumado (…) quiero que sepa el pueblo boliviano que hemos renunciado para que no busque la violencia por parte de las fuerzas agresivas», manifestó García Linera.
García Linera remarcó que siempre fue leal y que estaba orgulloso de haber sido el vicepresidente de un presidente indígena. Dirigiéndose a sus bases, manifestó: «Siempre estaremos del lado del más humilde. No los vamos a dejar solos. Y estoy seguro que, más temprano que tarde, nuevamente Bolivia levantará cabeza. Es un momento triste y aciago, pero la democracia del pueblo volverá a reestablecerse».
Desde la ciudad de Chimoré, adonde llegó con Morales esta tarde, García Linera explicó que la renuncia era «para que no ensangrienten nuestros campos y nuestros barrios», refiriéndose a los enfrentamientos y motines policiales que se han registrado en los últimos días y a la quema que manifestantes opositores hicieron a los domicilios de algunas autoridades en Potosí y Oruro.
Cerró su discurso diciendo que «seguro que nuevamente, más pronto que tarde, nuevamente Bolivia levantará cabeza. Es un momento triste y aciago, fuerzas oscuras han destruido la democracia» y acuso a la oposición de haber robado el voto al MAS.
«Siempre estaremos del lado del más humilde. No los vamos a dejar solos. Y estoy seguro que, más temprano que tarde, nuevamente Bolivia levantará cabeza. Es un momento triste y aciago, pero la democracia del pueblo volverá a reestablecerse», puntualizó el vicepresidente.