El expresidente de Bolivia Evo Morales denunció que el atentado que sufrió este domingo fue una operación militar y policial que fracasó y pidió la presencia de una delegación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para investigar los hechos.
“El intento de asesinato perpetrado esta mañana consistió en un operativo combinado con las fuerzas militares y policiales que fracasó gracias a fuerza y organización de los compañeros y compañeras de los movimientos sociales”, manifestó Morales en su cuenta de la red social X.
La acusación de Evo
De acuerdo con el exmandatario boliviano, el supuesto atentado fallido en su contra se suma a la derrota política “de un gobierno que perdió la legitimidad ante el pueblo boliviano” por la ineficiencia y corrupción.
“La derrota de la guerra judicial instaurada para criminalizar y perseguir compañeros y compañeras luego de la Marcha para Salvar Bolivia. Serán derrotados en todos los escenarios, porque nos acompaña un pueblo comprometido, organizado y movilizado, dispuesto a defender nuestra Revolución Democrática y Cultural”, agregó.
Horas antes, Morales publicó un video en las redes sociales para denunciar un atentado contra su vida, con al menos 14 disparos contra su vehículo.
La reacción de Arce
Al respecto, el presidente de Bolivia, Luis Arce, instruyó una investigación judicial para esclarecer la denuncia.
«El ejercicio de cualquier práctica violenta en la política debe ser condenada y esclarecida. No es con la búsqueda de muertos que se resuelven los problemas ni con especulaciones tendenciosas. Por eso, ante la denuncia del expresidente Evo Morales de un presunto atentado contra su vida, he instruido una inmediata y minuciosa investigación, para esclarecer este hecho», informó el mandatario.
Se intensifican los bloqueos
Las organizaciones afines a Evo Morales intensificaron este lunes las medidas de presión contra el Gobierno, iniciadas hace ya quince días, con nuevos bloqueos, especialmente en Cochabamba, después del ataque contra el expresidente.
Al menos se han establecido 22 puntos de bloqueo, de los cuales 18 están en Cochamba, incluido el aeropuerto de Chimoré, y varios más en las vías de acceso que comunican la región con Oruro, Potosí y Santa Cruz, informó la prensa boliviana.
Las protestas se intensificaron en las últimas horas tras el intento de asesinato que denunció haber sufrido el expresidente Morales cuando el vehículo en el que viajaba fue disparado por «un grupo de élite» de la Policía y el Ejército. Extremo negado por el Gobierno, que ha ordenado ya una investigación.
GS con información de Sputnik y Europa Press