El triunfo de Donald Treump en Estados Unidos está apurando modificaciones en todo el mundo y al cambio de ministro de Defensa en Israel se suma ahora la crisis de gabinete en Alemania. En efecto, el canciller Olaf Scholz se dispone a dirigir un Gobierno de minoría en Alemania, tras la expulsión del ministro de Finanzas, Christian Lindner, y la ruptura con el Partido Liberal (FDP) en la coalición que ahora solo componen socialdemócratas y verdes.
Scholz confirmó su intención de convocar al Parlamento a una moción de confianza el 15 de enero, que podría llevar a elecciones anticipadas a más tardar a fines de marzo. Está previsto que se reúna en las próximas horas con el líder de la opositora CDU/CSU, Friedrich Merz, con tal de confirmar dicho calendario electoral.
«Los ciudadanos tendrán pronto la oportunidad de decidir de nuevo cómo proceder. Están en su derecho. Por eso pediré al Bundestag un voto de confianza a principios del año que viene», dijo Scholz.
Por su parte, Merz, exigió mayor celeridad. Pidió que Scholz «convoque un voto de confianza inmediatamente, como muy tarde a principios de la semana que viene». Según Merz, unas nuevas elecciones serían posibles en la segunda quincena de enero.
A raíz del despido de Lindner, el FDP retiró a todos sus ministros del gobierno, poniendo fin de hecho a la coalición tripartita. Uno de los cuatro ministros liberales, el titular de la cartera de Transportes, Volker Wissing, renunció sin embargo a su partido y permanecerá en el gabinete.
The German government coalition has collapsed. Here’s a breakdown of what's next: pic.twitter.com/tpHx6Des9k
— DW News (@dwnews) November 7, 2024
Fuentes gubernamentales anticiparon a dpa que el sucesor de Lindner será el socialdemócrata Jörg Kukies, considerado como uno de los asesores más importantes de Scholz, con quien suele negociar los documentos finales de importantes cumbres financieras, como el G7 o el G20.
Está previsto que el nombramiento se oficialice a lo largo del día de hoy, una vez el presidente Frank-Walter Steinmeier haya a su vez formalizado la salida de Lindner, originada en sus serias desavenencias sobre política económica y presupuestaria.
Según informaciones de dpa, los cargos del ministro de Justicia, Marco Buschmann, y de la ministra de Educación, Bettina Stark-Watzinger, serán ocupados probablemente por actuales miembros del gabinete.
El último escollo insalvable que llevó a la ruptura era cómo tapar un enorme agujero en el presupuesto de 2025 y ayudar a la alicaída economía alemana, con los partidos diametralmente opuestos sobre las medidas necesarias para estimular el crecimiento.
Las divisiones en el seno de la coalición de gobierno llegaron a su punto álgido después de que el viernes se hiciera público un documento político de Lindner, en el que exigía una «reorientación» fundamental de la política económica del gobierno.
Despido
Scholz arremetió contra Lindner a última hora del miércoles, acusándole de clientelismo, de ahogar los compromisos durante sus tres años de gobierno conjunto con disputas escenificadas públicamente y de bloquear leyes por razones equivocadas.
Ich habe den Bundespräsidenten um die Entlassung des Finanzministers gebeten. Wer sich in dieser Lage einer Lösung verweigert, handelt verantwortungslos. Es gibt keine Vertrauensbasis.
— Bundeskanzler Olaf Scholz (@Bundeskanzler) November 6, 2024
Ich habe einen Amtseid geschworen: Ich halte stets das Wohl unseres ganzen Landes im Blick.
«Demasiadas veces ha recurrido a tácticas partidistas mezquinas. Ha roto mi confianza demasiadas veces«, explicó el canciller.
Lindner, por su parte, acusó a Scholz de romper deliberadamente la coalición y llevar al país a una fase de incertidumbre. Dijo que Scholz había «trivializado durante mucho tiempo las preocupaciones económicas de los ciudadanos» y no había reconocido la necesidad de que Alemania se embarcara en una nueva reactivación económica. Sus para mejorar la situación económica de Alemania fueron descartadas de plano, argumentó.
«Las contrapropuestas [de Scholz] son débiles, poco ambiciosas y no hacen nada para superar la debilidad fundamental de nuestro país en materia de crecimiento, de modo que podamos mantener nuestra prosperidad, nuestra seguridad social y nuestra responsabilidad medioambiental», añadió el líder del FDP.
El ministro de Economía y líder de Los Verdes, Robert Habeck, por su parte, se alineó con Scholz, argumentando que la ruptura de la coalición era tan lógica como innecesaria, ya que el FDP no había estado dispuesto a considerar las soluciones de compromiso puestas sobre la mesa.
Aunque había posibles soluciones sobre la mesa, no había sido posible tapar el enorme agujero del proyecto de presupuesto de Alemania para 2025, uno de los principales puntos de fricción para los partidos, dijo Habeck. «El FDP no estaba dispuesto a seguir estas vías». Lo que subyace en esta crisis es una caída económica fruto del incremento de los precios, sobre todo de la energía, y lo.s gatos militares por el apoyo a Ucrania.
Una cuestión que probablemente no se resolverá a finales de año es el presupuesto para 2025, dada la falta de una mayoría de coalición. También se considera improbable que los conservadores ayuden a aprobarlo.
Sin un presupuesto aprobado antes de enero, se necesitarán provisiones especiales para gastos más allá de los necesarios para mantener la administración en marcha y cumplir las obligaciones legales de Alemania.
El partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD), que marcha viento en popa en los sondeos, celebró el fracaso de la coalición de gobierno de Scholz, calificándolo de «liberación» para Alemania.
alg con dpa