En el panel referente al «Acceso a la tierra», Soraya Maicoño, de la Lof en Resistencia Cushamen, fue muy elocuente: «No nos pudieron colonizar hace 500 años. Más allá de toda la vulneración de los derechos, el problema fundamental por el cual estamos atravesados tiene que ver con el territorio». Con gran énfasis, la referente aseguró que «es importante empezar a trabajar nuestra propia identidad cultural. El gran trabajo que hace La Poderosa en las villas es para sacarse el sombrero, pero hay que tener un objetivo más superador».
Deolinda Carrizo, representante del Mocase (Sgo. del Estero) explicó: «Proponemos la vuelta al campo, hay que desarmar los latifundios armados y concentrados por unos pocos, con la sangre de nuestros hermanos».
Joaquin, del MST Brasil reseñó: «Soy hijo, nieto de lo que llamamos gaucheros. Los ataques y asesinatos son comunes para los que luchamos por la tierra. Sólo con unidad se vencerán los enemigos comunes».
Marta Figueredo, de OLP Paraguay, dijo: «Hace 25 años que resistimos a la criminalización y persecución con nuestros asentamientos».
Por su parte, Ninosca Pailacura, de la Lof newen (detranqui) Chile representó a la familia de Macarena Valdez, asesinada por resistir a una hidroeléctrica, «por luchar por la vida de ella y sus hijos y no nos vamos a callar hasta que haya justicia». «