De acuerdo con el matutino publicado en La Paz, Al-Azar -tres veces Premio Nacional de Periodismo en la categoría Caricatura- no tiene condiciones para continuar realizando ese trabajo creativo en las páginas editoriales, por lo que debe replegarse a la espera de un ambiente más tolerante y menos agresivo: «Más allá de las críticas que puede generar toda opinión en el marco del pluralismo y el debate público, las caricaturas de Al-Azar han sido contestadas, en especial en redes sociales, con profusión de insultos y amenazas», señaló el diario en un editorial. El medio lamentó la decisión de Salazar, pero asegura que entiende y respeta solidariamente sus razones «que habitan también nuestra cotidianidad.»
La Razón decidió dejar temporalmente en blanco los espacios ocupados por las viñetas de Al-Azar en sus páginas, como una manifestación contra al asedio y en defensa de la libertad de expresión.
Por su parte, Salazar expresó su tristeza por el desenlace y expresó su gratificación al medio y a sus seguidores. “Cierra hoy un ciclo para Al-Azar y sus espacios de opinión en el periódico La Razón. En este triste desenlace desemboca la intolerancia, la descalificación, el insulto y las amenazas. Ojalá vengan tiempos mejores. Gracias a todos, por el apoyo durante todos estos años”, expresó en Facebook.
Tras el golpe de Estado al presidente Evo Morales, y la autoproclamación de un nuevo gobierno de transición, comenzó una persecución política a miembros y simpatizantes del Movimiento al Socialismo, a medios de prensa y activistas que denuncian el golpismo.