“El orden del día es el siguiente: reducir los contactos y ver al menor número de gente posible”, indicó la canciller alemana en su habitual mensaje de los sábados.
Según el Instituto Robert Koch, el centro epidemiológico responsable del control y la prevención de enfermedades, un total de 10.003 personas murieron por la enfermedad causada por el coronavirus, tras sumar en las últimas horas 49 fallecidos.
“Nuestro comportamiento tiene una gran influencia en la velocidad a la cual se propaga el virus”, subrayó Merkel, quien el sábado pasado ya había rogado a sus conciudadanos “quedarse en casa” lo más posible.
“Lo que será el invierno, lo que será la Navidad, se decidirá en los días y semanas venideros”, había señalado en ese mensaje.
En total, 418.005 personas contrajeron el virus desde el inicio de la pandemia, 14.714 en las últimas 24 horas, un nuevo récord diario, pese a que esta cifra suma casos que no habían sido registrados ayer debido a un fallo técnico en la transmisión de datos, informó la agencia de noticias AFP.
El presidente del instituto Robert Koch, Lothar Wieler, estimó el jueves que la situación en el país es “muy grave” y exhortó a la población a respetar las medidas de prevención para frenar la propagación del virus.
“El virus puede propagarse sin control” en algunas regiones, alertó Wieler y subrayó que “los jóvenes son actualmente los más expuestos al virus”.
Alemania, que hasta ahora había sido relativamente poco afectada por la primera ola, registra desde hace semanas, como el conjunto de los países europeos, un fuerte aumento de los contagios de Covid-19.
Ante el rebrote epidémico, las autoridades del país dispusieron controles más estrictos, como la prohibición de aglomeraciones de personas, la obligatoriedad de la mascarilla en calles muy frecuentadas de Berlín o confinamientos localizados.