El rey Felipe VI de España encargó este martes al líder socialista Pedro Sánchez formar Gobierno, anunció la presidenta del Congreso de Diputados, tal como se esperaba luego de que el líder del derechista y opositor Partido Popular (PP) fracasara en su propio intento.
La diputada Francina Armengol dijo que el rey propuso a Sánchez, presidente del Gobierno en funciones, como candidato a la investidura al término de una ronda de consultas con partidos que obtuvieron bancas en las elecciones generales de julio.
Sánchez dijo que recibía con «ilusión» el encargo y que a partir del miércoles iniciará contactos con los líderes de otras fuerzas políticas en busca del apoyo necesario para lograr su investidura en una votación en el Congreso de los Diputados.
«Quiero decirles que lo hago con ilusión. Con la ilusión de saber todo lo que España puede avanzar en estos cuatro años con un Gobierno progresista», dijo el líder del partido PSOE en declaraciones en el Palacio de la Moncloa, la sede del Gobierno español, en Madrid.
El rey recibió este martes en el Palacio de la Zarzuela a Sánchez y a Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, y cerró la segunda ronda de consultas para proponer un nuevo candidato a la Presidencia del Gobierno.
Núñez Feijoó dijo a periodistas que Sánchez contaba ahora «con menos apoyos de los que contaba hace un mes», informó la agencia de noticias española Europa Press.
«Nos esperan semanas de muchas mentiras», agregó, en referencia a las negociaciones que emprenderá de Sánchez, que está en el poder desde 2018 y necesita el respaldo de partidos regionales independentistas para ser investido nuevamente.
Sánchez está en el poder desde 2018 y necesita el respaldo de partidos regionales independentistas para ser investido nuevamente
El PSOE salió segundo en las elecciones generales del 23 de julio, por detrás del PP.
El mes pasado, el rey encargó a Núñez Feijóo formar Gobierno, pero el líder popular se quedó a tres votos de lograrlo.
Al igual que el líder del PP, Sánchez podrá hacer dos intentos.
En una primera votación, deberá alcanzar la mayoría absoluta de 176 bancas del Congreso de los Diputados para poder volver a ser investido presidente del Gobierno.
Si no lo consiguiera, 48 horas horas después podrá ser investido con una mayoría simple, es decir con más votos positivos que negativos. Sánchez ya tiene asegurado el respaldo de los 121 diputados del PSOE.
Ahora busca agregar el de la coalición de izquierda Sumar, los partidos catalanes ERC y JxC, los vascos EH Bildu, PNV, el gallego BNG y el canario Coalición Canaria. Con esos apoyos, llegaría a 179 bancas, tres más que la mayoría absoluta.