En mayo cumplió los 89. El día en que le dieron el alta, en agosto, tras una internación con pronóstico severo, fue directo al lanzamiento de Blanca Rodríguez como candidata a senadora. Su salud se recupera lentamente y se alimenta casi totalmente por sonda. Pero a pesar de las recomendaciones médicas y las imposiciones de Lucía Topolansky, el Pepe no detuvo su actitud militante. Participó de mateadas, “para convencer a los que falta convencer”, en los últimos días de campaña. Y el domingo pasado fue muy temprano a votar a la Escuela 188, de la montevideana Avenida Cibils.
José Alberto Mujica Cordano es el Pepe. Así como dijo luego que el triunfo del Frente, para él significa un “premio de despedida”, luego en diferentes entrevistas expresó, entre otras cosas, que el “mayor acierto” de su vida fue encontrar a Lucía, que el “Estado es una caja de herramientas, no tiene conciencia. Los que fallamos somos los humanos que lo manejamos» y también que “en la vida hay un tiempo para llegar y otro tiempo para irse”, al criticar a algunos dirigentes progresistas de la región que “hacen frangolladas”. No evitó tampoco apuntar fuerte a Cristina Kirchner, Lula y Evo Morales. Y con Cristina Kirchner tuvo otro exabrupto, como en 2015, cuando dijo: “La Vieja es peor que el tuerto (por Néstor Kirchner). Esta vez expresó: «Ahí está, jodiendo en el peronismo en lugar dejar a los jóvenes ¡Cómo les cuesta largar el pastel!».
Aun cuando sonó como un exabrupto, Mariano Andrade, el periodista de AFP que lo entrevistó, explicó que «lo dijo como al pasar, no con agresividad. Lo dijo comopasando revista. Cristina no le cae mal. Como sí Milei (…). Luego comparó la elección de Milei con la llegada al poder de Hitler en Alemania y la hiperinflación en la República de Weimar».
Por otra parte, el mismo lunes lluvioso, tras las elecciones, recibió durante dos horas en su chacra de Rincón del Cerro al presidente electo, Yamandú Orsi, quien aseguró que se trató de una charla de «balance» y «perspectiva”, y agregó: “Él no plantea consejos, sino su experiencia”.
Si se quiere, un encuentro lógico: Yamandú desde el inicio de su carrera política militó en el MPP, la histórica agrupación del Pepe, quien le dio todo su apoyo en la interna y hasta reconoció que había convocado al FA a Blanca Rodríguez por si Carolina Cosse, la exintendenta de Montevideo que perdió la interna con Orsi, no aceptaba la candidatura a vicepresidenta.
Otra reunión del Pepe, mucho más controversial, fue la que mantuvo hace algunas horas con Guido Manini Rios, el líder de Cabildo Abierto, quien hizo parte de su campaña vestido con uniforme castrense, blanqueando sin pudor su rol de representante leal de la casta militar. Se conocen: el exgeneral subió al cargo de comandante en jefe, justo un mes antes del final de gobierno de Mujica, y lo fue hasta que Tabaré Vazquez, sucesor del Pepe, lo cesó en sus funciones en 2019. Manini entonces se dedicó a la política.
Actualmente senador, fue a la chacra de Mujica: le habría pedido concretamente que interceda en la libertad de los militares de mayor edad que se encuentran detenidos, aun los que integran la listas de represores de la dictadura. Con lógica abrumadora, los organismos de DD HH pusieron el grito en el cielo de inmediato. Incluso, Familiares afirmaron que CA “está tratando de vender los votos de sus dos diputados”: es que al FA, justamente, en el futuro parlamento integrado con los resultados de octubre pasado, le restarán dos bancas para tener la mayoría absoluta, que sí tiene ya en el Senado.