El tétrico contador no se detiene hace casi nueve meses y volvió a acelerarse en las últimas horas. Pero además, una de las cifras más indagadas, la de muertos en el mundo, supera por estas horas la siniestra barrera del millón. Los últimos registros oficiales, según todas las medidoras serias, vienen marcando más de 6000 muertos diarios en el planeta. Y si bien no llegan a los 8513 que se apuntaron el 17 de abril, desde julio pasado el promedio diario va entre los 6500 y los 5000 según los días de la semana que se contemplen. Encima, hace unas horas, Michael Ryan, el director de emergencias de la Organización Mundial de la Salud, auguró: «Un millón es una cifra terrible y tenemos que reflexionar sobre ello antes de empezar a considerar seriamente un segundo millón».
Por otra parte, ayer, por décima vez en lo que va del mes, la cifra de nuevos casos diarios quebró la línea de los 300 mil, lo que no había sucedido hasta el 4 de septiembre. Este último escalofriante registro, 318.952, de todos modos es más bajo que el mayor en pandemia: 322.564 del viernes 18. Y si bien se sabe que estos números están supeditados a las muy diferentes maneras de cargar las estadísticas del Covid-19 de los sistemas de salud de los distintos países, sirven como parámetro para considerar la persistencia de la pandemia en el planeta. Más allá de que, además, se sospecha en distintas partes, o bien se retacean las cifras o bien el conteo no tiene la seriedad ni el rigor que las circunstancias lo ameritan. Por lo que la propia OMS sospecha que las cantidades reales son muy mayores a las oficiales.
De este modo, el mundo va por los 33 millones de casos, así como Asia quebró la barrera de los 10 millones: el 61% de esos infectados está en la India. En América del Norte, de los 8,65 millones de contagiados, más de 7,24 millones pertenecen a EE UU (con 209 mil muertos). Ese país tiene una cantidad de casos apenas menor que el total de Sudamérica: 7,82 millones con casi 250 mil muertos. Brasil sigue liderando esa siniestra lista con 4,7 millones de contagiados y 32 mil muertos, delante de Colombia (800 mil casos y 25 mil fallecidos), Perú (798 mil y 32 mil), Argentina y Chile (455 mil y 12,6 mil). Claro que si se toma la cantidad de muertos por millón de habitantes, el peor promedio es el de Perú (968), delante de Bolivia (663), Brasil (661), Chile (654), Ecuador (635) y Colombia (492). Recién allí encontramos a la Argentina (336), si bien aún no se agregaron los 3500 casos que se computan con la nueva mirada. En ese caso, si se llega a los 19 mil muertos, el porcentaje será de 431. «
Europa y la impredecible segunda ola
Los grandes titulares de los diarios de toda Europa volvieron a estallar con lo que consideran como el inevitable e impredecible comienzo de la segunda ola importante del Covid-19. En España, por caso, mencionan que “los expertos consideran que la situación en Madrid requiere ya medidas severamente más estrictas”, al tiempo que en las últimas horas, el ministro de Sanidad nacional, Salvador Illa, les lanzó una urgente advertencia pública las autoridades de la capital de España («Está en un serio riesgo sanitario») y reclamó un “urgente armisticio” en la permanente discusión política entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la mandataria madrileña, Isabel Díaz Ayuso. A su vez, el vice comunal, Ignacio Aguado hace unas horas reclamó la urgente intervención logística del Ejército y el permiso para la incorporación de 300 médicos extracomunitarios como forma de paliar esta nueva crisis.
En Francia, París y otras diez ciudades se decretó el estado de «alerta forzada» por la veloz crecida de casos y el hallazgo de casi 2000 brotes en el país, con más de 15 mil casos diarios, lo que eleva el total a cerca de 520 mil contagiados y más de 31 mil muertos.
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La excepción, en todo caso, es Italia: toda una paradoja al haber sido uno de los países más violentamente golpeados por el Covid, al punto que, al principio de la crisis, desbordó sin eufemismos el sistema sanitario en toda la península. Su promedio diario actual de contagios (1,8 mil) es mucho más bajo que Francia y España, y también que Rusia (7000), Reino Unido (6,8 mil), Croacia (3,5 mil), Alemania (2,4 mil) y Holanda (2,3 mil). El infectólogo Massimo Andreoni, del hospital romano de la Universidad Tor Vergata, explicó que «Italia fue el primer país en llevar a cabo un cierre total que duró varias semanas (…) y aún nos beneficiamos de ello». Destacó que la «reapertura es muy progresiva y muy lenta». Y resumió: «Los italianos respetan bastante bien las reglas. Cuando veo las imágenes de otras ciudades europeas, veo mucha más gente sin mascarilla que en Italia».
