El embajador venezolano en Argentina, Carlos Martínez Mendoza, denunció este miércoles que recibió “amenazas de muerte” a través de las redes sociales, en mensajes en que se promovió también ataques a su vivienda en la ciudad de Buenos Aires por medio de bombas de excremento, una modalidad adoptada en las últimas manifestaciones opositoras en Caracas.

Martínez Mendoza relató hoy en la sede de la embajada que cuatro personas, identificados como ciudadanos venezolanos residentes en Buenos Aires, le enviaron mensajes directos a través de las redes sociales. Uno de ellos sugería contratar a “un sicario” para directamente eliminar a funcionarios del gobierno chavista. “Muerto el perro se acabó la rabia”, dice el mensaje.
Otra de las agresiones publica una foto de la residencia oficial del embajador y convoca a arrojarle “pupu-tov”, como llaman a las bombas de excremento, una modalidad que instalaron recientemente los opositores que se manifiestan en Venezuela.
El embajador confirmó a Tiempo que realizará mañana una denuncia ante la Cancillería argentina, debido a que no se trata solo de una amenaza de muerte, sino que es “un asunto diplomático de profunda gravedad”. 
Según indicaron en la embajada, se trata de dos hombres y dos mujeres. Tres de ellos utilizaron sus perfiles auténticos para realizar las agresiones. La sede diplomática asegura que dos de los identificados “trabajan como empleados para el gobierno de la Ciudad”.
El embajador aseguró que desde su lugar como representante diplomático está “obligado a pedir acciones para que se preserve mi integridad, pero también porque un hecho así puede generar un conflicto diplomático, estas personas son profesionales de la violencia”, advirtió.