Las elecciones “subnacionales” del próximo 7 de marzo en Bolivia agitan el escenario político del país, sobre todo dentro del gobernante Movimiento al Socialismo (MAS), que sufrió una fractura por la elección del candidato a la alcaldía de la ciudad de El Alto, vecina de La Paz, y bastión del expresidente Evo Morales. Producto de la disputa, la dirección regional decidió expulsar este jueves a la expresidenta del Senado, Eva Copa. El conflicto venía de la semana anterior, cuando Copa, aspirante a la alcaldía de esa ciudad, chocó contra la dirigencia y el propio Evo, que promovían a otro dirigente, Zacarías Maquera, pese a que la exsenadora tenía el apoyo de varias organizaciones. El lunes pasado, cuando se cerró la inscripción de candidatos, Copa se registró por la agrupación Jallalla La Paz, lo que motivó su expulsión por haber “vulnerado el estatuto orgánico del partido” al inscribirse por otra sigla. “Hemos visto que algunos personajes solo estaban buscando sus apetitos personales. A raíz de ese tema, el ampliado determinó expulsar a la señora Eva Copa”, sostuvo el dirigente del MAS Marco Antonio Poma.

Entre lágrimas, Copa dijo estar «decepcionada por algunos grupos que no permiten que haya renovación, que los nuevos liderazgos surjan». En su salida, arrastró a un grupo de juventudes que renunció al frente oficialista y apoyará su candidatura. La lealtad de Copa había sido cuestionada en días posteriores al golpe de Estado en Bolivia, cuando primero no aceptó ocupar la presidencia del país tras la renuncia de Evo y luego avaló la anulación de los resultados electorales de octubre.

Evo se hizo eco del caso y señaló que «en este momento nos hemos conocido, quiénes somos, qué hermanos son de convicción y qué hermanos estaban solo por un cargo», según publicó el diario Página Siete. No fueron los únicos conflictos registrados tras el cierre. Para el municipio de la ciudad de La Paz se produjo también la ruptura de una alianza entre los partidos del excandidato Carlos Mesa (Comunidad Ciudadana), del empresario Samuel Doria Medina (UN) y del alcalde saliente Luis Revilla (Sol.bo). Por otro lado, sorprendieron las postulaciones del excandidato presidencial de derecha, Luis Fernando Camacho, para la gobernación del rico departamento de Santa Cruz, y de la expresidenta de facto, Jeanine Áñez, a gobernadora por el departamento amazónico de Beni, su tierra natal, horas después de anunciar su ruptura con el partido Demócratas que la apoyó en su gestión.