El embajador de China en Argentina, Zou Xiaoli, dijo este lunes que su país persistirá en su política «cero covid», pese a las incipientes protestas desatadas en su país, donde vienen aumentado los contagios, en una rueda de prensa en la que abordó un amplio abanico de temas, como los vínculos con Argentina y la región, la guerra en Ucrania, el multilateralismo, Taiwán y la relación con Estados Unidos.
China prioriza «el pueblo, la salud y la vida con su estrategia que busca prevenir tanto las infecciones locales, como la introducción de nuevos casos desde el exterior. Persistimos en la política cero covid», dijo el representante chino a periodistas en una charla en formato virtual.
En China, donde según información entregada por Zou ayer se registraron 3748 casos confirmados de coronavirus y 36.304 asintomáticos, esa estrategia permitió contener con gran eficiencia la pandemia, pero los efectos económicos y el prolongado encierro empiezan a producir hartazgo en la población, que en los últimos días empezó a protestar en las calles.
Sobre este punto, el representante chino señaló que «últimamente en algunas regiones de China se registra una importante cantidad de casos nuevos (..) lo que genera una enorme presión a nuestras políticas de prevención entre los jóvenes».
Sobre la relación entre el gigante asiático y la región, Zou celebró el buen momento con Argentina y señaló que tras el ingreso del país a la iniciativa de la Franja y la Ruta -en febrero pasado-, ambas partes vienen fortaleciendo su comunicación en términos de políticas, conectividad e infraestructura, fluidez comercial y financiera, además del «acercamiento entre ambos pueblos».
Asimismo, celebró la reciprocidad de ambas naciones al resaltar que Beijing apoya plenamente la soberanía argentina sobre las Islas Malvinas, mientras la Argentina se adhiere «con firmeza» al principio de «una sola China» que sostiene Beijing como una línea roja innegociable y que establece que tanto China continental, como Hong Kong, Macao y Taiwán son todos parte de una única entidad nacional, un tema que viene tensando las relaciones Beijing- Washington en los últimos meses.
En relación al panorama regional configurado tras el triunfo en Brasil del presidente electo Luiz Inácio Lula da Silva, dijo que su país está dispuesto a trabajar junto con la nueva gestión brasileña, en aras de potenciar las relaciones «y llevar nuestro vínculo con América Latina y el Caribe en su conjunto» «hacia niveles más elevados, en mayor beneficio de ambas partes y nuestros pueblos».
«Tenemos muchos consensos alcanzados. Queremos desarrollar a la población y apoyamos con firmeza las políticas que traigan respeto mutuo, igualdad y beneficios recíprocos», dijo.
Pese a la pandemia de Covid-19 -insistió- se registra «un gran desarrollo de la cooperación económica entre ambas partes», y ejemplificó que el volumen comercial entre China y América Latina y el Caribe rondó los 450.000 millones de dólares por primera vez.
«Brasil, Argentina y México son importantes miembros del mundo en desarrollo y los mercados emergentes, y existe consenso sobre el multilateralismo; entonces queremos profundizar nuestra relación práctica a fin de salvaguardar la paz y la estabilidad regionales y mundiales en pro de la prosperidad compartida», prosiguió.
También dijo que en la última reunión del presidente chino, Xi Jinping, con su homólogo estadounidense Joe Biden, en la isla indonesia de Bali previo a la cumbre del G20, el norteamericano le aseguró que su país no quiere desencadenar una nueva Guerra Fría ni fortalecer la alianza en contra de China ni apoyar a la supuesta independencia de Taiwán ni realizar más confrontaciones» con China.
Zou también explicó que las autoridades chinas dejaron claro ante Biden que la situación de Taiwán y la política de «una sola China» son líneas rojas que ningún país debería traspasar.
En relación a la guerra entre Rusia y Ucrania iniciada el pasado 24 de febrero, un tema sobre el que China recibió críticas occidentales por no sumarse a las sanciones a Moscú impulsadas por Washington y la Unión Europea, Zou dijo que la postura de Beijing es «respeto por la soberanía y la integridad territorial de los diferentes países, dar prioridad a las inquietudes de seguridad razonables de los países y apoyar a cualquier empeño que conduzca a la resolución pacífica de esta crisis».
«Lanzamos sucesivamente la iniciativa por resolver la crisis humanitaria y la iniciativa sobre la población por la seguridad alimentaria de esa región ofreciendo en muchas oportunidades la asistencia humanitaria urgente a Ucrania y otros países en desarrollo afectados por la crisis. Aportamos la voz y la fuerza de China a fin de mitigar esta crisis y restaurar la situación», dijo.
En otro tramo de la charla con periodistas, y consultado por el interés de China por participar en la construcción de un eventual puerto en la provincia de Tierra del Fuego, el embajador dijo que esa legación diplomática tomó nota de que «algún portal aborda los temas sobre China (,..) con mala intención e incluso a través de rumores, lo que socava la cooperación bilateral».
«Estamos realizando gestiones con este portal, a fin de aclarar las dudas en salvaguarda de sus derechos e intereses legítimos. Esperamos que los amigos periodistas no escuchen ni reproduzcan rumores, y respeten la verdad».
En el caso de que Argentina tenga demandas, «queremos seguir participando en la construcción de infraestructura de Argentina en apoyo del desarrollo económico y la mejoría del bienestar», concluyó.