Islamabad

Al menos 93 muertos y 58 heridos dejó un atentado suicida con bombas y un tiroteo, en un hospital de Quetta, en el oeste de Pakistán, lugar al que poco antes trasladaron el cuerpo sin vida de un prominente abogado asesinado.

El ministro de salud de Baluchistán confirmó que en el atentado murieron 93 personas. La televisión local en lengua urdu ARY News detalló que entre los asesinados había 25 abogados y dos periodistas, informó la agencia de noticias Xin Hua.

Entre los juristas se encuentra, Bilal Anwar Kasi, presidente de la Asociación de Abogados de Baluchistán. Kasi murió por disparos contra su vehículo de un grupo de hombres sin identificar, alrededor de las 09:00 (00:00, hora en Argentina) en el barrio de Manno Jan, dijo el portavoz de la Policía provincial, Ghulam Akbar, según despachos de Xin Hua y EFE.

Casi una hora más tarde del arribo al Hospital Civil de Quetta del cadáver de Kasi, ocurrió «una fuerte explosión» en el centro asistencial, donde se encontraban presentes un gran número de abogados, que habían ido a retirar sus restos. Además de la deflagración sucedió un tiroteo entre un grupo sin identificar y agentes de Policía.

El jefe de Gobierno de Baluchistán, Sanaullah Zehri, declaró al canal de televisión Geo que se trata de un ataque suicida «planeado», que contaba que por el asesinato del abogado ocurriría la llegada de los letrados al hospital. «Sabían que dispararían al abogado y que otros abogados irían al hospital. El suicida explotó las bombas que portaba cuando los abogados fueron al hospital», dijo Zehri.

El mandatario indicó que desconocen quién está detrás del ataque y subrayó que los grupos insurgentes se están centrando en objetivos «blandos». Entre las víctimas mortales y los heridos se encuentran varios abogados y periodistas que fueron a cubrir el asesinato de Kasi, indicó el periódico The Express Tribune. Tras la explosión declararon el estado de emergencia en todos los hospitales de Quetta.

Un escuadrón antiexplosivos explicó que el atentado fue obra de un suicida, que, estimaron los expertos, escondía entre 8 y 10 kg de explosivos en su chaqueta. Agregó que encontraron miembros del autor del atentado, que serán analizados en laboratorios forenses. Ningún grupo se proclamó responsable hasta el momento.

El primer ministro pakistaní, Nawaz Sharif, condenó el ataque y se comprometió a extirpar del país a los grupos terroristas del país. El gobierno local de Baluchistán anunció un duelo de tres días, durante el cual las banderas estarán a media asta en toda la provincia. Los abogados de Baluchistán y del puerto de Karachi no trabajaron hoy, y la asociación nacional condenó el atentado, además de sumarse al duelo de tres días.