Roma
Los equipos de socorro rescataron los primeros tres cuerpos del hotel Rigopiano, en el centro de Italia, que quedó sepultado por una avalancha, tras los cuatro terremotos que el miércoles sacudieron el país, mientras se espera por el destino de otras casi 30 personas atrapadas en del lugar.
Luego de horas de trabajo de los socorristas en el hotel de la región de los Abruzos, a más de mil metros de altura en zona de montañas, un primer cuerpo fue extraído alrededor de las 9:30 locales (5:30 de Argentina) y otros dos fueron hallados pasado el mediodía. Antes de ello, Antonio Crocetta, uno de los miembros de las fuerzas de rescate que hoy trabajaban en el lugar del siniestro, había avisado que «hay muchos muertos» en el hotel.
Este jueves, mientras continuaban los trabajos, la fiscalía de Pescara abrió una investigación por «homicidio culposo», luego de que se conociera que los 22 huéspedes del hotel estuvieron más de dos horas esperando ser trasladados antes de la avalancha, por lo que el alud los habría sorprendido en el «hall» del lugar.
Los primeros equipos de socorro del Cuerpo de los Alpinos habían llegado con esquíes al lugar a las 4 de la mañana (medianoche argentina) y rescataron a dos de los huéspedes que estaban fuera del hotel durante el alud y que pudieron refugiarse en un coche y advertir sobre lo ocurrido.
«Socorro, nos estamos muriendo de frío dentro del hotel», escribieron a los socorristas Giampiero Parete y Fabio Salzetta, los primeros en ser rescatados. Según refiere la edición online de Corriere, Parete aseguró a los rescatistas que dentro del hotel quedaron atrapados su mujer y sus dos hijos.
El albergue se encuentra en la localidad de Farindola, a unos 1200 metros de altura y a 170 kilómetros al noreste de Roma, en la cordillera de los Apeninos, una zona que, además de las fuertes nevadas de los últimos días, ayer se vio afectado por los sismos que hicieron temblar al centro de Italia.
El Hotel, de 4 estrellas, tenía Spa, canchas de tenis y pileta climatizada, y promocionaba habitaciones «exclusivas» con camas de «hierro forjado» y «vistas al macizo del Gran Sasso». Las habitaciones dobles en temporada alta rondan los 200 euros por noche, con público en su mayoría de diversas regiones de Italia que en invierno viajan a las zonas donde se practica esquí.
«Estamos frente a una tenaza sin precedentes. Por un lado un fenómeno meteorológico con nevadas de una intensidad que no se recordaban; y por el otro hechos sísmicos como los de ayer de una intensidad muy elevada. Y se amplifican uno al otro», aseveró el premier Paolo Gentiloni, al dar las primeras informaciones sobre el trabajo de los equipos de rescate.