El ministro de Economía, Sergio Massa, fustigó este viernes la propuesta de dolarización planteada desde sectores de la oposición, entre ellos el diputado libertario Javier Milei, al sostener que apunta a «salarios de 100 dólares y un dólar a 1.900 pesos», y advirtió que, «lo que entra en debate cada vez que hay un proceso electoral es una economía para el desarrollo versus una economía para la especulación».

Así lo señaló el titular del Palacio de Hacienda al exponer ante el Consejo Productivo que se realizó en el marco de la Expo BNA Conecta, en el que anunció la ampliación de la línea CreAR Inversión Pyme en $ 30.000 millones, que se suman a la ampliación de $50 mil millones anunciada el miércoles pasado, mediante dos líneas que se agotaron en una hora y en siete minutos, respectivamente.

La Secretaría de Industria y Desarrollo Productivo amplió esta semana la línea CreAr Inversión PyME con el Banco Nación en $80 mil millones, con una línea cuenta con una inversión del Estado nacional en la bonificación de 27 puntos porcentuales de tasas, para que las empresas accedan a financiamiento con tasas competitivas, del 49%, con un plazo de 5 años.

“Acá hay una decisión que es la de promover el nivel de inversión para sostener y aumentar el volumen de producción de bienes y el volumen de exportaciones. No es regalar créditos como dicen algunos, sino apostar a que aquellos que todos los días se levantan, invierten, producen, generan empleo, valor y además divisas para la Argentina, tengan herramientas de promoción porque para el Estado es importante aumentar, multiplicar la producción de bienes y las exportaciones”, afirmó Massa.

En este sentido, el ministro destacó que el Gobierno subió la tasa «para los que especulan, pero la baja para los que producen».

«Es una elección respecto de un modelo de país en el que hay un debate y una tensión permanente entre la economía asociada a la generación de valor, al desarrollo industrial, a la generación de empleo, versus la economía asociada a la especulación y también a la generación de valor ficticia sobre la base de la búsqueda de rentabilidad en instrumentos financieros”, resaltó.

El ministro tuvo palabras de elogio para Silvina Batakis, presidenta del Banco Nación, que estaba sentada a su lado, al señalar que «es de las que pone el cuerpo en los momentos difíciles y lo demostró en un momento muy complejo», en referencia al inicio de julio de 2022 cuando asumió la cartera económica, luego de la renuncia de Martín Guzmán.

Por tal razón, luego de recordar que la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner dijera que había sido él quien tuvo que «agarrar una papa caliente», Massa valoró que fue Batakis «la primera que se tiró arriba de la bomba».

Asimismo, destacó la importancia del Banco Nación por su presencia en todo el país y la «capilaridad» que le dan sus 730 sucursales para el otorgamiento de asistencia a los sectores productivos, en particular cuando las exportaciones están afectadas por «la peor sequía de la historia».

Massa identificó a la inversión, las exportaciones y el consumo como «las tres turbinas centrales» de la economía, y que con la sequía la de las exportaciones quedó «averiada».

«Eso nos obliga a aumentar los volúmenes de inversión y consumo para tratar de compensar el daño a la turbina de las exportaciones, sobre todo en el sector agroindustrial», planteó.

En ese sentido, indicó que «en definitiva, lo que entra en debate cada vez que hay un proceso electoral es una economía para el desarrollo versus una economía para la especulación» y seguidamente le preguntó a los empresarios «cuánto mercado van a poder sostener con salarios de 100 dólares y dólares a 1.900 pesos para su producción».

«Esa es la dolarización», enfatizó, diferenciándose de la propuesta de Milei, además de advertir que se preste atención a «lo que se pone en juego en la Argentina en estos momentos».

El jefe del Palacio de Hacienda finalmente sostuvo: «Los que creemos en el trabajo, el desarrollo, el capital humano, el valor agregado, tenemos que defender la capacidad de producción usando también la competitividad cambiaria».

«Algunos pueden conseguir y buscar esa paz de los cementerios, pero no queremos industrias muertas en la Argentina, vamos a aumentar la cantidad de créditos a tasa subsidiada y si no alcanza, la vamos a seguir aumentando», expresó.