Las fotos hablan y transmiten un mundo de complejidades. Cuando las mostré por primera vez lo hice con un poco de vergüenza, tenía 22 años, recuerda Alfredo Srur, fotógrafo, hoy con 39 años, que inauguró su muestra que se titula Familias en el 1º piso de de la Fundación Tomás Eloy Martínez (TEM), Carlos Calvo 4319, en el barrio porteño de Boedo.
Es un trabajo del porno aficionado no industrial. Es uno de los trabajos más complejos que hice en mi vida y por eso me cuesta mucho hablar sobre el tema. Lo hice en un momento y situación difícil de mi vida, atravesaba una crisis personal en un momento complicado de nuestro país, contó el artista.
Por primera vez se exhibieron las 41 fotografías en blanco y negro. Srur las hizo en Buenos Aires entre 1999 y 2001, cuando llamó su atención la precariedad de la industria del cine porno en Argentina. Por eso se contactó con un grupo de actores de este género. Pero escarbó más allá de las cámaras: su trabajo se basa en la vida cotidiana de estas mujeres y hombres.
En el año 2000, Martínez pudo ver las fotos por casualidad, eran algunas de las primeras copias, mientras el trabajo estaba en pleno proceso. Entonces le dijo a Srur que las tenía que mostrar porque las consideraba muy especiales. Para ello le cedió el espacio en la fundación TEM.
Alfredo tomó nota de lo que pasa cuando la vida privada se convierte en pública, el placer se convierte en trabajo y el trabajo, para colmo, está mal pago. Todo eso mientras los argentinos descubríamos el enorme costo social que deviene cuando todo lo que debe ser público se convierte en privado. La combinación entre un desfase y el otro surge, con nitidez, en estas fotos que inevitablemente son, también, fotos de un momento preciso de la Argentina, afirma Daniel Riera en el texto curatorial que acompaña la muestra.
La muestra Familia se puede visitar hasta marzo de 2017.