Luciano Olivera tenía 16 años. Iba en moto con amigos en Miramar cuando pasó por un control policial y no se detuvo. Comenzó a ser perseguido y un efectivo le disparó y lo mató. El agente quedó detenido y la familia comenzó a increpar a los policías, ante un presunto nuevo caso de gatillo fácil en territorio bonaerense.
Según la primera información que trascendió, los amigos de Luciano contaron que se asustó cuando los pararon en el retén policial y se fue. En medio de la persecución a uno de los agentes se le habría escapado el tiro, según su versión. Se espera el reporte oficial de la fuerza. El hecho generó la reacción de los familiares, que fueron reprimidos con gases lacrimógenos.
“El menor estaba yendo a su casa en moto, hasta que en un momento comenzó a ser perseguido por un patrullero y en un confuso episodio recibió un disparo en el pecho que le causó la muerte. Todo sucedió sobre la 1:30 de la madrugada en la avenida 9 y calle 34 de la ciudad de Miramar”, dijo Mauricio Linares, docente y vecino, a la prensa local. Agregó que “minutos después la madre del joven y sus amigos lo encontraron en el suelo. Posteriormente comenzaron a increpar a los efectivos policiales diciendo que el joven sólo estaba jugando al fútbol”.
El subsecretario de Seguridad de General Alvarado, Antonio Centurión, dijo a Radio Brisas que “las circunstancias del acontecimiento se sabrán. La fiscal Ana María Caro está en el lugar trabajando con la policía federal. No podemos decir mucho más hasta el momento, sólo que hay un menor muerto y que se dispuso la aprehensión del efectivo que efectuó el disparo”. Las pericias quedarán a cargo de la Policía Federal.
La denuncia de la familia
Familiares de Luciano Olivera denunciaron que el efectivo detenido ya venía hostigando al grupo de amigos de la víctima y era del mismo barrio.
«Él cuando lo chocaron venía solo pero los amigos venían atrás de él y vieron todo. Salía de jugar a la pelota en el ‘anfi’ de Miramar y se iba a dormir para la casa. No estaba en nada raro, ni venía de nada raro», dijo al canal C5N Yésica, una prima del adolescente asesinado, que además resultó herida con balas de goma. Contó además -según consignó la agencia Télam- que el autor del disparo es un policía que solía molestar y hostigar al grupo de que integraba Luciano.
«Este pibe ya venía haciéndole cosas a todo el grupo de amigos, los paraba y los ponía contra el patrullero haciéndose el dueño de no sé qué mierda», denunció la joven. Solange, tía de Luciano, indicó también que al policía implicado lo conocen: «Se crió con nosotros en el barrio Parque Mar. Se reciben de policías y se creen no sé qué (…) Los chicos salen el fin de semana y cuentan que los paran, los verduguean y les pegan».