En el barrio Villa Floresta, en la zona este de la capital salteña, los residentes denunciaron que su vecino David Alfonso murió luego de ser ahorcado por un efectivo del regimiento de infantería de la Policía de Salta.

Este sábado, la policía llegó al barrio para efectuar el desalojo de un grupo de familias en el límite del barrio. En ese contexto, según los vecinos, mientras la fuerza buscaba correr a una mujer con cuatro hijos de su casa en el terreno fiscal que lleva cuatro años desocupado, el hombre intentó ayudarla y reclamó a la policía que no los sacara y a los vecinos que no retrocedieran. La versión oficial dice que Alfonso se descompuso y murió mientras esperaban la ambulancia, pero los vecinos le contaron a periodistas del diferentes medios provinciales que fueron los uniformados quienes lo dejaron inconsciente al tomarlo del cuello, y luego murió antes de que llegara la ambulancia.

Revista Cítrica presenta el testimonio de Marisol, que se encontraba presente en el lugar: “En el momento del desalojo, Don David le dice a la señora ‘vos no te tenés que ir de acá. Estos terrenos no tienen dueño, son de la provincia’. Tres oficiales de Infantería agarran a David del cuello, se descompone y lo tiran al piso como una bolsa de papa». Similares testimonios fueron presentados ante medios locales. 

Todos los testimonios coinciden en que la mujer y sus cinco hijos vivían en una casilla construida por un policía hace unos cuatro años pero que nunca habitó. Y que llegó al lugar junto con otros efectivos para sacar a la mujer. Según los testimonios, luego de que le advirtieran que le sacarían a sus hijos la mujer aceptó irse, pero se acercó Alfonso y mientras intervenía pacíficamente fue tomado por la fuerza del cuello y tirado sin conocimiento fuera del terreno, donde finalmente murió. «Él no era un hombre que hiciera quilombo, era muy trabajador y solidario, estaba peleando por un merendero para los chicos del barrio», dijo un vecino.

Noemí, la madre de los cuatro hijos de David, dice que “los policías solamente miraban y se burlaban de él”, y que los hijos “están muy mal. El que está peor es el menor de 17 años que estaba allí cuando sucedió todo y filmó el video donde se lo ve a él tirado ahí y la policía sin hacer nada”.

Si bien tres policías fueron suspendidos por el tiempo que dure la investigación, medios periodísticos dieron a conocer los resultados de la autopsia que indicarían que Alfonso murió por muerte súbita, dejando de lado la responsabilidad de los uniformados en el hecho.