El viernes al mediodía, un grupo de sospechosos se movió a sus anchas por la ex Regional de Inteligencia de Buenos Aires (RIBA) de la Fuerza Aérea de Morón, donde en la última dictadura militar funcionó un centro clandestino de detención y se coordinó gran parte del aparato represivo en el oeste del conurbano. El lugar resultó vandalizado e incendiado. Ahora, mientras los investigadores tratan de dar con los autores, el municipio de Morón replantea su rol frente al inmueble y comenzó a gestionar ante Nación la desafectación definitiva del lugar.

El Tribunal Oral Federal 5 de San Martín condenó, en septiembre de 2016, al ex Jefe de la Fuerza Aérea e integrante de la Segunda Junta Militar, Omar Graffigna, a 25 años de prisión por la privación de la libertad y los tormentos contra Patricia Roisinblit y José Pérez Rojo, ocurridos en 1978 en el chalet de la ex RIBA, situada en San Martín al 700, casi esquina Entre Ríos, en Morón. Patricia luego dio a luz en cautiverio en la ESMA a Guillermo Pérez Roisinblit, quien fue apropiado y recién conoció su identidad en el 2000. La pareja desapareció y no se supo qué ocurrió con los cadáveres.

El fallo del TOF 5 contempló igual pena para Luis Trillo, quien era el jefe de la casona, y 12 años de cárcel para el apropiador Francisco Gómez. La resolución judicial también instaba a continuar con la investigación sobre las decenas de detenciones que pasaron por allí.

A su vez, los jueces dejaron asentado que la RIBA debía transformarse en un espacio para mantener viva la memoria. Pero esta orden judicial quedó a mitad de camino. En julio de 2017, el secretario de Derecho Humanos bonaerense, Santiago Cantón, y su par local, el director de Derechos Humanos, Francisco Mones Ruiz, señalizaron el lugar para que todo aquel que pasara por allí, supiera que había funcionado un centro clandestino. Poco después, Mones Ruiz –que responde a Elisa Carrió- tuvo diferencias con el intendente Ramiro Tagliaferro y se fue a trabajar con Cantón.

En tanto, no se había registrado ninguna novedad sobre la RIBA hasta este fin de semana, cuando tras el incendio se supo que el lugar no tenía el servicio de luz, ni de gas. Además, trascendió que los trabajadores municipales apenas pasaban por allí una vez cada dos meses para cortar el pasto y algunas ramas. El espacio estaba librado a su suerte.

Fuentes municipales y judiciales coincidieron en señalar que el incendio se produjo de manera intencional y se establecieron tres focos de fuego. “Los dos más graves fueron en donde se encontraban algunos escombros de la Mansión Seré y otro donde había documentos históricos, revistas de cultura y material de aquella época”, precisaron los voceros, quienes aseguraron que “las pruebas que ya fueron utilizadas durante el juicio del TOF 5 no fueron afectadas y se encontraban en una habitación en la segunda planta”.

Desde la UFI 2 que interviene en el caso indicaron a este medio que abogados de organismos de Derechos Humanos se acercaron a los Tribunales para conocer la magnitud de las pérdidas, dado que el sitio está a disposición de la justicia hasta que se realice el segundo juicio. “Se les informó que en lo sustancial, las pruebas no fueron modificadas”, indicaron.

A partir de este episodio, diferentes funcionarios de la comuna precisaron que comenzaron a reclamar ante las autoridades provinciales y nacionales para que se motorice la desafectación definitiva del predio, en manos hoy del Ministerio de Defensa, en favor del municipio, así se transforma en un centro cultural que pueda ser utilizado como archivo y museo. Vale decir que los organismos de Derechos Humanos criticaron fuertemente el rol que tuvo el municipio para poder prevenir este hecho.

Incendios sugestivos

Al día siguiente del incendio de la ex RIBA, un grupo de desconocidos prendió fuego una parte importante del vivero municipal, en Morón Sur. “Ayer se incendió nuestro Vivero Municipal. Las pericias indican que habría sido intencional. Lamentablemente todavía existen los que no entienden que el patrimonio público es para que disfruten nuestras familias”, dijo horas después desde su Twitter Ramiro Tagliaferro.