Entre los 50 compromisos que el Gobierno de la Ciudad definió en febrero de 2016 y que postula en su página web, se encuentra el de garantizar un subte cada 3 minutos en hora pico.
Sin embargo, a casi cuatro años y medio de que el subte quedara en manos del Ejecutivo porteño, sólo las líneas B y C cumplen con esa frecuencia. La peor es la E, que se excedió un 87% ese promedio de minutos.
Así lo estipula un informe de SUBTE.data, el primer sitio de datos abiertos sobre el subte, en base a los números oficiales hasta el mes de julio de este año.
Llama la atención especialmente el caso de la línea D que, pese a contar con una disponibilidad de formaciones que le permitiría brindar una frecuencia aún menor a la comprometida, tuvo una frecuencia superior. Por otro lado, el caso de la línea E, que registró el nivel más alto de apartamiento, merece una atención especial en orden a garantizar a sus usuarios la misma calidad de servicio de la que gozan los usuarios de las otras líneas, apunta el estudio.
Para poder cumplir con la frecuencia de 3 minutos deberían despacharse, en hora pico, 20 formaciones desde cada cabecera de línea. En julio pasado las líneas A, E y H no contaron con las formaciones necesarias para cumplir con la frecuencia comprometida: a la A (Plaza de Mayo-San Pedrito) le faltaba una formación; a la línea E (Bolívar-Plaza de los Virreyes), 6 formaciones; y a la línea H (Las Heras-Hospitales), tres.
Sabiendo el tiempo que demora la vuelta completa, SUBTE.data realizó un cuadro de Frecuencia Promedio Hipotética para estimar la frecuencia promedio que se podría alcanzar en cada línea con las formaciones disponibles: las líneas B (Alem-Rosas) y D (Catedral-Congreso de Tucumán) estarían en condiciones de alcanzar frecuencias promedio por debajo de los 3 minutos, la línea C podría alcanzar esa frecuencia, mientras que la A la superaría en diez segundos; la línea E se excedería 1 minuto 37 segundos; y la línea H, 45 segundos.
El mecanismo de Compromisos de Gobierno que el Jefe de Gobierno lanzó en febrero de 2016 es una muy buena iniciativa. No obstante, la falta de ámbitos y canales formales de participación de la sociedad civil para una supervisión y seguimiento adecuados y constantes de estos Compromisos, es a nuestro juicio, un déficit importante, expresó Rafael Gentili, responsable del proyecto Subte.DATA y agregó: lo que sin duda no ayuda a la consolidación del mecanismo de los Compromisos de Gobierno es que la información que se publica en la web no guarde relación con lo que realmente está sucediendo.