Siete personas fueron procesadas en Santa Fe por el delito de «incendio con peligro común para los bienes» por la quema de pastizales en la zona de islas del Delta del Paraná, que ocasionaron «serios daños en todo el ecosistema y biodiversidad autóctona» y «afecciones a la salud» humana, informaron fuentes judiciales.
El juez federal No. 1 de Santa Fe, Reinaldo Rodríguez, procesó a los investigados por las quemas sin dictarles prisión preventiva –atento a que no tenían antecedentes penales- y les trabó embargo por 20 mil pesos, agregaron las fuentes.
Los procesados son dos hermanos pescadores 35 y 36 años; un ganadero de 48; un empleado municipal de 39; dos jornaleros de 47 y 50; y un hombre desocupado de 57.
Además, el juez dictó la falta de mérito para un puestero de 23 años, de acuerdo con el dictamen del fiscal del caso, Jorge Onel.
La causa se inició el 18 de julio pasado con el objeto de determinar el origen, alcance y presuntos responsables de las quemas de pastizales que desde hacía varios días se venían produciendo en el ámbito de las provincias de Santa Fe y Entre Ríos, en el Delta del Paraná.
El fiscal solicitó a la Prefectura Naval y a Protección Civil de Santa Fe una investigación de los incendios y la individualización de sus autores.
Tras la pesquisa, Onel solicitó al juez las declaraciones indagatorias de ocho personas por cuatro hechos ocurridos en las islas «Las Ánimas», «La Manzana», «Las Flores Este», «Los 4 hermanos» y «Curtiembre».
En su resolución, el juez señaló que «las actividades de quema que llevaron adelante, más allá de resultar una práctica común en las zonas de islas donde se realizan todos los años con la finalidad de ‘renovación de pastura’, debieron haberlas evitado».
En ese sentido, ponderó que quienes iniciaron el fuego no tuvieron en cuenta «las inclemencias climáticas que se estaban dando, sumado además a que tales prácticas se encuentran prohibidas».
Rodríguez también tuvo en cuenta el contexto en el que se produjeron los incendios durante todo el año pasado, que derivaron en la quema de más de 300 mil hectáreas de humedales del Delta del Paraná.
«No puede soslayarse lo sucedido con respecto a la situación de las quemas sobre una gran cantidad de islas y humedales ubicados sobre los territorios de esta provincia y la vecina provincia de Entre Ríos, donde los incendios aquí en estudio son una parte de aquellos», sostuvo.
El magistrado agregó que ello «generó serios daños en todo el ecosistema y biodiversidad autóctona, destruyendo gran parte de la flora y fauna».
«Al tiempo que produjo -continúa el fallo- afecciones a la salud de las personas, ocasionando principalmente problemas respiratorios y en la visión como consecuencia del humo constante y las partículas de cenizas suspendidas en la atmósfera, alterando asimismo al medio ambiente y generando en él, daños graves y de difícil reparación producto de la calcinación de los recursos naturales».