La Asesora General Tutelar del Ministerio Público Tutelar, Yael Bendel comparó la sentencia del caso Lucía Pérez, donde fueron absueltos todos los acusados de femicidio, con el controvertido video de Rodrigo Eguillor en el que se defiende las acusaciones en su contra. Para ella, tanto el fallo de los jueces de Mar del Plata como el abordaje de los medios de comunicación del abuso que habría protagonizado Rodrigo Eguillor estigmatizan a las mujeres.
“La distinción entre “chicas de bien» o «flojita de tanga» por parte de Rodrigo Eguillor, es similar a la pregunta “¿era Lucía una adolescente que podía ser fácilmente sometida a mantener relaciones sexuales sin su consentimiento?» que es uno de los argumentos esgrimidos por los jueces en el caso de Lucía Pérez”, analizó Bendel .
“Lucía tenía 16 años era una adolescente y como tal, doblemente vulnerable: tanto por su edad como por su género. Mujer, víctima y menor de edad. Estas tres dimensiones fueron desatendidas en el proceso judicial. Ninguna norma de protección especial de derechos de infancia fue analizada ni aplicada al caso, ni la Convención sobre los Derechos del Niño, ni la Ley de Protección Integral de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes”, continuó la funcionaria judicial, quien argumentó también que no se contemplaron las convenciones “sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer” y la “Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer”.
Para Bendel “hoy debimos soportar por horas, y en todos los medios de comunicación las declaraciones de Rodrigo Eguillor, acusado de abuso sexual, también culpando a la víctima y poniendo el foco en su vida privada. Si como sociedad aceptamos estos fallos y naturalizamos estas declaraciones estamos adhiriendo a la violencia contra niñas y adolescentes”.
El hijo de la fiscal de Lomas de Zamora Paula Martínez Castro quedó demorado esta tarde en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza por agentes de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) quienes le notificaron que no podía salir del país, tal cual como tenía previsto ir a España para ver el Superclásico.
Luego de que trascendieran otras denuncias en su contra, el joven de 24 años había asegurado a diferentes canales de televisión que abandonaría el país. El último hecho que se le imputa ocurrió en el barrio porteño de San Telmo, donde habría abusado de una joven de 22 años en un departamento.
La supuesta agresión, que se conoció ayer, ocurrió hace casi tres semanas, pero el caso tomó relevancia cuando el sospechoso publicó un descargo en las redes sociales negando los hechos y acusando a la denunciante como «una negra de mierda» que «le quiere sacar plata».
Esta mañana, el muchacho dijo desde el aeropuerto de Ezeiza: «Soy un pibe de bien, yo la salvé cuando se quiso suicidar, y siempre estuve a derecho». «O la piba tomó alguna droga, o tenía problemas psiquiátricos. Yo soy inocente, no estoy arrepentido de nada», agregó.
Según se pudo reconstruir, el 15 de noviembre la policía de la Ciudad arribó a un departamento de Independencia y Piedras, porque una chica gritaba y forcejeaba con Eguillor en el balcón de un tercer piso.
La situación quedó registrada en imágenes que tomó un vecino con un celular, donde se ve que la chica gritaba «me quiere matar» en medio del forcejeo, y que el acusado logró meterla dentro del departamento en momentos en que ingresaban los bomberos.
Tras ser rescatada, la joven estudiante y oriunda del partido bonaerense de Ituzaingó fue trasladada a un hospital en estado de shock, donde declaró, según consta en la causa judicial, que intentaba escapar porque había sido abusada.
Días después, Eguillor emitió un video en vivo a través de la red social Instagram, donde dijo que la chica había tenido un brote, que quería suicidarse y que él había intervenido para salvarla. «¿Quieren saber cómo es la historia? Si quieren saber cómo es la historia, posta, posta. Si quieren que les diga la posta, se las cuento. Si no, sigan hablando y díganme ‘violín’ y todo eso. Total, no tienen ninguna prueba. No hay ninguna causa en judiciales», dijo el acusado.
Al conocerse la denuncia, hubo otras mujeres que a través de las redes sociales lo acusaron de maltrato, y fuentes judiciales confirmaron, según publicó la Agencia Télam, que tiene otras dos causas, una por amenazas en una fiscalía de Monte Chingolo y otra por grooming.
La causa por el hecho ocurrido en San Telmo, caratulada como «averiguación de ilícito», es investigada por la fiscalía Criminal y Correccional N° 22 a cargo de Eduardo Cubrìa, y el Juzgado Nº 48 de Alicia Iermini.