Este viernes por la tarde renunció del jefe de la policía de la Ciudad, Carlos Kevorkian, quien había asumido el cargo en febrero de este año. En su lugar, quedó Gabriel Berar, subjefe de la fuerza, de forma interina, según lo informado por el ministerio de Justicia y Seguridad de la Ciudad, que emitió el siguiente comunicado: «Tras haber escuchado personalmente estas razones el Jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, y el Ministro de Justicia y Seguridad, Martín Ocampo, agradecieron su dedicación y compromiso con la tarea», sin esgrimir más detalles sobre los motivos de la renuncia.
Kevorkian presentó su «renuncia indeclinable», tras «más de cuatro décadas de trabajo y habiendo ocupado las máximas jerarquías de la carrera policial».
Kevorkian ocupó el cargo luego del escándalo que le costó el puesto a su antecesor, José Potocar, por una causa por «asociación ilícita».
Potocar estuvo 100 días preso en 2017 y espera por su juicio en libertad, luego de ser investigado por el fiscal porteño José María Campagnoli.
Según la investigación, en la Comisaría 35° había un sistema de recaudación espurio que consistía en extorsionar a comerciantes de la zona a cambio de «seguridad privilegiada», y de pedirles una cierta suma de dinero a los «trapitos» para dejarlos trabajar.
Por la misma causa, estuvo prófugo durante un año y medio el comisario Norberto Villarreal, hasta que se entregó en abril último.